Israel intensifica sus ataques aéreos mientras Hamas dispara proyectiles contra Tel Aviv

El inicio de la segunda jornada de la ofensiva «Operación Margen Protector» lanzada por Israel contra los grupos armados de Gaza invita a pensar hoy que la escalada es mucho más grave que la última en noviembre del 2012. Esta mañana mientras la Fuerza Aérea israelí ha intensificado sus ataques en la Franja, cinco proyectiles M-75 del brazo armado del grupo islamista Hamas han sido interceptados en los cielos de Tel Aviv por la bateria «Kipat Barzel» (Cúpula de Hierro), al tiempo que uno ha impactado al mediodía en campo abierto en una zona al sur de Haifa.

Tanto Israel como Hamas advierten – y lo demuestran en el terreno y en el cielo- que están dispuestos a «ir hasta el final» ya sea con las preparativos para una operación terrestre del Tsáhal en Gaza como por el masivo y estratégico disparo contra ciudades israelíes. Se cree que los últimos proyectiles palestinos tenían como objetivo el aeropuerto internacional Ben Gurion, cerca de Tel Aviv, una ciudad que no vivía ataques con esta frecuencia desde los misiles Scud de Saddam Hussein en la guerra del Golfo a principios de los 90.

El balance de la tercera contienda entre Israel y Hamas desde que este grupo controla Gaza en 2007 llega este míércoles a los 35 muertos palestinos (destacados miembros del brazo armado de Hamas y Yihad, pero también numerosos civiles como, por ejemplo, ocho niños) y un centenar de heridos. En Israel, hay varios heridos pero no hay muertos gracias a las siete baterías defensivas que ha neutralizado más de 30 proyectiles dirigidos a zonas residenciales. El resto de cohetes, (más de 200) impactaron en campo abierto.

Ante los masivos ataques aéreos, el portavoz de Hamas Sami Abu Zuhri, ha avisado: «La ocupación israelí va a pagar un precio muy alto por todo ello».

Por su parte, y tras reunirse con la cúpula militar, Netanyahu ha afirmado: «Hemos ordenado aumentar los ataques contra Hamas y el resto de grupos terroristas de Gaza. El ejército esta preparado para todas las posibilidades. Hamas pagará un precio muy elevado por los proyectiles que dispara contra los ciudadanos israelíes».

‘Baile’ de ataques

Esta madrugada, la Fuerza Aérea israelí ha realizado 160 ataques en Gaza ante la desesperación de sus habitantes y con énfasis en lanzaderas de proyectiles, túneles y casas de destacados cabecillas del brazo armado de Hamas y la Yihad Islámica como Hafiz Hamad o Raed Atar.

Al mismo tiempo, los proyectiles palestinos de largo alcance han conseguido llegar a gran parte de Israel: desde la sureña Beer-Sheeba pasando por las emblemáticas Jerusalén y Tel Aviv en el centro y llegando anoche incluso a la norteña Hadera, localidad situada a 116 kilómetros de la Franja. La creencia es que si no fuera por el éxito de la «Cúpula de Hierro» en centros urbanos israelíes, ahora mismo varias brigadas estarían ya en el interior de la Franja.

«Desde el inicio de la ofensiva para frenar los ataques desde Gaza, la Fuerza Aérea ha realizado 430 ataques, 120 de ellos contra lanzaderas de proyectiles, diez sedes de mando y numerosos túneles usados para ataques terroristas», ha afirmado el portavoz del ejército, Peter Lerner. Israel desea aprovechar la actual escalada para destruir el mayor número de proyectiles de largo alcance. Se cree que Hamas y la Yihad poseen entre 400 y 500 proyectiles con un alcance superior a los 80 kilómetros.

«Las calles están hoy casi vacías y no cesan los ataques que son cada vez más duros», dice por teléfono un habitante de Gaza. Fuentes palestinas informan que el ataque contra Hafiz Hamad -importante cabecilla de la Yihad- ha provocado su muerte y la de cinco familiares en un populoso barrio de Beit Hanun, al norte de la Franja.

La intensidad de los ataques y el hecho de que la Franja sea una de las zonas más densamente pobladas del mundo llevará a un aumento gradual del número de víctimas civiles. Mientras Hamas acusa a Israel de «crímenes de guerra», el jefe de Gobierno, Benjamin Netanyahu, denuncia: «Los terroristas disparan contra civiles israelíes usando como escudo humano a los civiles palestinos. Hacemos todos los esfuerzos para evitar bajas de civiles».

El papel de Abu Mazen

Tras el pacto de Gobierno de unidad con Hamas anunciado el pasado 2 de junio, el presidente palestino, Abu Mazen, es teóricamente el responsable de lo que sucede en la Franja de Gaza. Pero con malas relaciones con Hamas (a raíz del asesinato de los tres adolescentes israelíes el pasado 12 de junio) y sin diálogo directo con Netanyahu, su capacidad de mediación es aún limitada.

El ‘rais’ palestino conversó ayer por teléfono con el presidente de Egipto, Abdelfatah al Sisi. Según la agencia palestina Wafa, «en sus conversaciones con líderes regionales y mundiales Abu Mazen ha criticado duramente a Israel y ha pedido que se ponga fin «de manera inmediata a esta peligrosa escalada bélica que solo puede conducir a la región a más inestabilidad y destrucción».

Aunque en Israel muy pocos dirigentes apoyan una invasión, la inercia del terreno puede arrastrar al ejército a Gaza. «Hay que quitarse los guantes ante Hamas», ordenó ayer Netanyahu, que durante las últimas tres semanas de cohetes desde Gaza fue duramente criticado por la derecha y los habitantes del sur de Israel por no ordenar una ofensiva.

En Israel hay consenso prácticamente absoluto de que Hamas no ha dejado otra alternativa a Netanyahu tras rechazar la fórmula «calma a cambio de calma».

Incluso el pacifista Gershon Baskin -conocido por sus relaciones con algunos dirigentes islamistas en Gaza y su posición crítica hacia Netanyahu- responsabiliza hoy a Hamas de la escalada. «Puedo decir de forma honesta que Netanyahu no quiso esta guerra», ha afirmado, añadiendo que Hamas no contestó a su oferta de 24 horas de tregua. Que un hombre tan identificado con la izquierda pacifista critique con tanta dureza a Hamas por esta escalada es una muestra más del consenso israelí en estos momentos. Un consenso que se pondrá a examen en caso de desarrollarse una operación terrestre.