Por Israel


Defendemos un ideal no a un gobierno
Síguenos en Facebook Twitter Twitter YouTube RSS Feed
| domingo diciembre 22, 2024

Parasha Toldot


Itzjak se casa con Rivka. Luego de veinte años sin hijos, sus plegarias son respondidas y Rivka concibe. El embarazo es difícil, ya que “los niños se pelean dentro suyo”; Di-s le dice que tiene “dos naciones en su vientre”, y que su hijo menor prevalecerá por sobre el mayor.

Eisav sale primero. Iaacov nace tomando el talón de Eisav. Eisav crece para ser un “cazador, un hombre del campo”; Iaacov es un “hombre completo”, un habitante de las tiendas del estudio. Itzjak prefiere a Eisav, Rivka a Iaacov. Volviendo exhausto y hambriento del campo luego del día de caza, Eisav vende a Iaacov los méritos que le corresponden como primogénito por un guiso de lentejas rojas.

En Grar, en la tierra de los Filisteos, Itzjak presenta a Rivka como su hermana, por temor a ser asesinado por alguien que desee la belleza de Rivka. Trabaja la tierra, destapa los pozos que su padre Avraham cavó y cava una serie de nuevos pozos de agua: sobre los dos primeros hay una lucha contra los Filisteos, pero las aguas del tercer pozo son disfrutadas con tranquilidad.

Eisav se casa con dos mujeres jititas. Itzjak envejece y queda ciego, y expresa su deseo de bendecir a Eisav antes de su muerte. Mientras Eisav sale a cazar para preparar la comida preferida de su padre, Rivka viste a Iaacov con la ropa de Eisav, cubre sus brazos con piel de cabra para simular a su velludo hermano, prepara un plato similar y envía a Iaacov hacia su padre. Iaacov recibe la bendición de su padre de tener “el rocío del cielo y lo mejor de la tierra” y para gobernar a su hermano. Cuando Eisav vuelve y el engaño es revelado, todo lo que Itzjak puede hacer por su hijo es predecir que vivirá por su espada y que, cuando Iaacov descienda, Eisav subirá.

Iaacov deja su casa hacia Jarán para escaparse de la ira de Eisav y para encontrar una esposa en la familia del hermano de su madre, Laban. Eisav se casa con una tercera mujer, Majlat, la hija de Ishmael.

LA ASTUCIA DE IAACOV

Iaakov cocía cierta vez un guiso cuando Eisav vino exhausto, del campo, al hogar… Eisav le dijo a Iaakov: “¡Dame un bocado de esa cosa roja! ¡Estoy hambriento…“Primero véndeme tu derecho de primogenitura”, replicó Iaakov. “¡He aquí que estoy a punto de morir! –Exclamó Eisav–. ¿De qué me sirve un derecho de primogenitura… Hizo el juramento y le vendió a Iaakov su derecho de primogenitura….Entonces Iaakov le dio a Eisav pan y guiso de lentejas.

Llama la atención el hecho de que Iaacov le diera pan a Eisav y luego el guiso. Eisav sólo había pedido guiso. Hay un Midrash que lo explica. Iaacov sabía que si se efectuaba la venta de la primogenitura mientras su hermano estaba hambriento, éste podía posteriormente alegar que realizó la cesión de sus derechos bajo presión, porque estaba desfalleciendo de hambre. Entonces Iaacov actuó con astucia. Alegando que el guiso no estaba listo, dio a su hermano pan y agua. Luego le hizo firmar la cesión de la primogenitura y posteriormente le dio el guiso. Así, si Eisav trataba de anular la venta, Iaacov destruiría su argumento principal diciendo: “¿Acaso antes de firmar no comiste una hogaza de pan? No puedes decir que estabas hambriento cuando me vendiste la primogenitura”.

«SANVICHES»

Ella se llevaba un almuerzo kosher, rápidamente se ganó el apodo de «Sándwiches»
Por Shimon Posner

Mi padre fue criado en el viejo mundo, en un lugar llamado Nujoisy, en el pueblo de Elizabeth. Sus padres habían llegado allí desde Israel, donde él había nacido. Habían llegado a Israel desde Rusia poco antes de su nacimiento. A su vez, habían abandonado Rusia luego que el padre de mi abuelo fuera asesinado en un pogrom.

La familia de mi abuelo ̶ abuelos, tíos, tías y primos ̶ estaba en los Estados Unidos hacía ya una generación.
Cuando mi abuela se reunía con la familia completa, ella se llevaba un almuerzo kosher: rápidamente se ganó el apodo de «Sándwiches». En las calles de su barrio judío, los niños más grandes les sacaban las kipot de la cabeza a sus hijos menores, mi padre y mi tío Laibel. Una burla es un desafío tan grande como un pogrom.

El Rebe Anterior (Rab Iosef Isaac Schneersohn, 1880-1950) había escapado recientemente de la pena de muerte bolchevique y estaba de visita en los Estados Unidos. Mi abuela llevó a sus dos hijos pequeños para verlo. Entró al cuarto y rompió en llanto. «¿Cómo se supone que debo criar niños judíos en aza shverre land, una tierra tan dura?».

“Es verdad, es un país duro, una zeier a shverre land», asintió el Rebe, «una tierra muy dura. Sin embargo, en este país, criarás niños buenos, judíos y piadosos».
Varios años más tarde, mi padre y su hermano, en ese entonces adolescentes, estaban junto al Rebe. Y él les dijo: «Todo debe ser pensado en relación con la época y el lugar en que uno se encuentra. Sus padres venían de un lugar muy distinto al lugar en que ustedes se encuentran. No sería justo que se comparen con ellos; pero ustedes, tampoco, pueden ser un producto del ambiente que los rodea. Deben crear su propio entorno. No son niños de la calle. Admiren a sus padres, ‘vivan como’ ellos».

Mi padre y su hermano todavía «viven como» sus padres. El Rebe les habló a comienzos de la década de los cuarenta.
Escuché esta historia por primera vez a comienzos de los setenta y, desde entonces, la he escuchado docenas de veces. Cuando alguno de los dos la cuenta, uno piensa que están hablando de algo que sucedió hace diez minutos.

«Estas son las generaciones de Itzjak, hijo de Abraham, Abraham engendró a Itzjak». La parashá parece repetitiva hasta que el gran comentador Rashi hace una distinción de las fuerzas convergentes vitales para la educación: hijos «viviendo como» sus padres, padres viviendo para sus hijos. «Sándwiches», en el fondo, es una mezcla de idishe y jasidishe najas. (www.es.chabad.org)

https://www.facebook.com/groups/446798878780085/

 
Comentarios

Aún no hay comentarios.

Deja un comentario

Debes estar conectado para publicar un comentario. Oprime aqui para conectarte.

¿Aún no te has registrado? Regístrate ahora para poder comentar.