No tengo ningún problema con las declaraciones y comentarios de los anteriores jefes del Shin Bet, de la Dirección de Inteligencia Militar, Mossad y otros generales retirados sobre presuntas fallas del primer ministro Benjamin Netanyahu y errores estratégicos, aunque no estoy de acuerdo con ningún argumento que han presentado, especialmente la declaración ridícula e indignante que algunos de sus movimientos han puesto en peligro la seguridad y el futuro de Israel.
Ya que estamos viviendo en una democracia absoluta, cada ciudadano, sin duda, tiene derecho a expresar su opinión, incluso si la razón de algunos es un ataque salvaje de estos profetas apocalípticos sobre Netanyahu y se deriva de un interés completamente personal-político.
Pero tengo un problema muy grande (y creo que no soy el único con este problema, sino que muchos de los ciudadanos del estado también) con el momento de estos ataques por parte de funcionarios de seguridad profesionales. En otras palabras, se me hace difícil entender y aceptar que todas estas personas «interesadas» que ahora nos están advirtiendo servían al estado bajo gobiernos dirigidos por Netanyahu durante años.
Si entendieron en su momento, como se puede deducir de sus palabras de hoy, que el hombre (Bibi) es un peligro para la existencia del Estado, ¿Por qué no dijeron nada entonces? Tal vez sus comentarios de hoy no sean tan precisos.
Como empleados de alto nivel en las instituciones de seguridad, no podían expresar su opinión en público. Por lo tanto, deberían haber salido inmediatamente y advertir contra un primer ministro que está causando tanto daño a Israel. Extraño, ninguno de ellos lo hizo.
Rueda de prensa de generales retirados. Si sabían y callaron, su comportamiento es tan peligroso como las presuntas acciones irresponsables de Netanyahu (Foto: Motti Kimchi)
También estoy negándome a «comprar» la explicación de que se mantuvieron en sus posiciones con el fin de tratar de supervisar «al jefe» y hacer todo lo posible para evitar otros «peligros». ¿Es posible que esta conducta y este silencio surjan de su deseo de completar su término y recibir por ello una pensión y los pagos generosos – por decir lo menos – que se les concedió en su jubilación? ¿Es posible que su conciencia hubiera sido víctima del deseo ante todo de asegurar su futuro financiero?
Eso sí que es extraño y difícil de creer, pero es la única conclusión lógica de su comportamiento. Y eso es un gran problema. Si sabían y callaron, este comportamiento es tan peligroso como las supuestas acciones irresponsables de Netanyahu.
También entiendo que nuestros funcionarios de seguridad no pueden revelar los detalles reales con el fin de apoyar sus demandas. Eso tiene sentido.
No obstante, me resulta difícil de entender y aceptar la apariencia y los comentarios de seis de ellos, los ex directores del Shin Bet, en Gatekeepers”, una película que provoca graves daños al Estado de Israel. Esta película está siendo utilizada en varias ocasiones en muchos países alrededor del mundo como material venenoso contra nuestro país. ¿Cómo exactamente los héroes de esta película de propaganda anti-israelí explican y justifican su aparición y comentarios?
No renunciaron en el momento porque hubiese sido peor. Asi hubiesen debilitado mas la seguridad de Israel. ¿Se imaginan, «renuncio porque el PM ha tomado decisiones erradas»? Netanyahu no es capaz de traer la paz para Israel. Su politica de «dilatemos las cosas» no sirve para nada. ¿O alguien cree que los palestinos se van quedar de brazos cruzados con este status quo?