[La israelidad derrite lo ‘imposible’ y crea plenitud de recursos y determinación, incluso cuando las probabilidades parecen escasas (Foto: Reuters)]
KATMANDU – «Sabíamos que vendrían», me dijo el oficial del ejército nepalés. «Ustedes son el mejor ejército del mundo. He vivido en Israel durante dos años y admiro a su país. Shalom, falafel y tehina». Y entonces se puso serio por un momento y añadió: «Ayúdennos, por favor».
Los horribles espectáculos dejados por los terremotos en India y Haití y el tsunami en Japón, pasaron rápidamente ante mis ojos cuando recibí la llamada telefónica sobre el viaje a Nepal: «Estate en el aeropuerto en dos horas. Estamos volando a una zona de desastre de nuevo».
La fuerza de rescate israelí, enviada por el Comando del Frente Interno y el Cuerpo Médico de las FDI, tiene una difícil misión: Rescatar a israelíes que están fuera de contacto y ayudar a la indefensa gente de Nepal cuyo mundo entero se ha hecho añicos.
Es un desafío importante: Es imposible aterrizar una gran fuerza en el montañoso aeropuerto de Katmandú, no hay medios para descargar 80 toneladas de equipo de los aviones y, básicamente, no hay manera de enviar una misión de rescate en un período tan corto de tiempo a un destino tan lejano. Pero parece que el Estado de Israel no está familiarizado con el mundo «imposible».
Hay un extraño brebaje llamado israelidad (israeliut en hebreo): derrite lo «imposible» y crea plenitud de recursos y determinación, incluso cuando las probabilidades parecen escasas. Si no hay conductores nepaleses durante la noche, se los despierta; si los camiones no se ajustan, se quitan sus paneles laterales; cuando los lugareños dicen «sólo podemos hacerlo mañana», se los despierta poco después de la medianoche.
La fuerza de rescate israelí incluye a las mejores personas del país. Llegamos a Nepal y hemos estado en Haití y Turquía. Si es necesario, iremos hasta la Antártida.
Durante 15 años he estado viajando por zonas de desastre de todo el mundo para ayudar a la gente. He conocido delegaciones de decenas de países – pero todavía tengo que conocer delegaciones con médicos y oficiales tan profesionales, dedicados, valientes y experimentados.
Toma 12 horas instalar un hospital. Un total de 120 profesionales de la medicina trabajarán en ella. Tratarán, con total dedicación, a todos los niños en peligro, a toda mujer embarazada que perdería su feto sin atención médica y a todas las personas que podrían perder sus extremidades sin un tratamiento adecuado.
La bandera de Israel se elevará sobre las tiendas de campaña que sirven como hospital. Y todos levantaremos nuestras cabezas y miraremos con orgullo. Por un momento, eso podría encubrir cualquier atisbo de cinismo.
El Coronel (res.) Dr. Ariel Bar es un miembro de la misión de rescate de las FDI a Nepal
http://www.ynetnews.com/articles/0,7340,L-4652206,00.html
Traducido para porisrael.org por José Blumenfeld
Quien salva una vida… salva la humanidad…..