Un estudio pionero realizado en Haifa indica que hablar por un celular de forma regular por más de una hora al día, y hacerlo con el terminal conectado al cargador, dobla las posibilidades de que se produzca una disminución en la concentración de espermatozoides de un 33,3% a un 66,7%.
El estudio destaca también que la concentración de espermatozoides decrece a niveles anormales en los hombres que suelen llevar los teléfonos a una distancia de menos de 50 cms. de la ingle. Esa concentración se encontró en un 47,1% de los que llevan el móvil tan cerca, en comparación con el 11,1% del total de los hombres.
Las conclusiones del estudio, publicados en Reproductive BioMedicine Online, una revista científica, respaldan las sospechas que se tienen desde hace mucho tiempo: la relación entre el uso de celulares y la infertilidad masculina a causa de la radiación de frecuencias electromagnéticas que emiten aquellos.
“A la vista de los datos que aporta la investigación, es recomendable acortar la duración de las llamadas, no llevar el teléfono junto a las ingles, evitar dormir cerca del terminal, no hablar mientras se está cargando (de hecho, es mejor apagarlo mientras se carga) y usar auriculares o manos libres siempre que sea posible”, advierte el doctor Ariel Zilberlicht, responsable del estudio, ginecólogo en el Centro Médico Carmel y profesor de la Facultad de Medicina del Instituto Technion, ambos en Haifa.
Zilberlicht y sus colegas enfatizan que son necesarios nuevos estudios y de mayor envergadura para confirmar sus conclusiones sobre el daño que causa la radiación de los móviles a la infertilidad masculina.
El estudio más importante hasta la fecha
La calidad del esperma masculino, en constante disminución en los países occidentales, es responsable del 40% de los problemas de infertilidad en parejas.
El conocimiento acumulado sobre este tema demuestra que factores congénitos, así como variables medioambientales (lo que incluye el creciente uso de teléfonos móviles), afectan la calidad del esperma.
Estudios previos hechos para examinar una posible relación entre los efectos de la radiación emitida por los celulares y la calidad del esperma llegaron a conclusiones diferentes, pues se llevaron a cabo bajo condiciones distintas, tales como experimentos de laboratorio con tejidos o con animales. Además, muchos de los estudios no abordaron todas las variables relevantes.
En la reciente investigación, que se hizo en Haifa, participaron 106 hombres que fueron examinados en la Unidad de Fertilidad y Fecundación In Vitro del Centro Médico Carmel en 2011 y 2012, y consideró una amplia gama de variables relacionadas con los hábitos en el uso de teléfonos móviles y la calidad del esperma bajo parámetros establecidos por la Organización Mundial de la Salud en 2010.
Los participantes completaron cuestionarios detallados que incluyeron aspectos demográficos, condiciones médicas que puedan afectar el semen y preguntas exhaustivas sobre el uso del celular, entre ellas, cuánto tiempo hablan cada día por teléfono, dónde llevan el terminal, si las llamadas hechas o recibidas son en lugares con mala cobertura y mientras el móvil se está cargando.
Tras recopilar la información, los investigadores examinaron la conexión entre las variables independientes y los resultados de calidad del esperma. El artículo mencionado, que incluye las conclusiones de la investigación, se titula “Habits of cell phone usage and sperm quality—does it warrant attention” (Hábitos de uso del teléfono móvil y la calidad del esperma: ¿requieren atención?).
El estudio fue parte de la tesis doctoral de la doctora Yulia Sheinfeld, de la Facultad de Medicina del Instituto Technion, bajo la supervisión de la profesora asociada del Technion Martha Dirnfeld, directora de la Unidad de Fertilidad y Fecundación In Vitro del Centro Médico Carmel.
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