Por Israel


Defendemos un ideal no a un gobierno
Síguenos en Facebook Twitter Twitter YouTube RSS Feed
| martes abril 23, 2024

Guerra es Guerra


 

(Las Fuerzas de Defensa de Israel descubren un túnel de 8 metros de profundidad usado para contrabandear armas en la frontera de Egipto con Israel. Crédito Fotografico: Blog de las Fuerzas de Defensa de Israel, Flickr,  Wikimedia Commons).

Traducción para PorIsrael: Marcelo Piwnica

La aproximación moderna a muchos asuntos dicta que nosotros tratamos de controlar los hechos que nos rodean  pero la guerra es caótica por naturaleza y no cede a determinados procesos. La prudencia con que se realizó la campaña de Gaza debe tener la confianza de todo el público.

Aun antes que el Controlador de cuentas del Estado, Yosef Shapira diera un reporte sobre la campaña militar a la Franja de Gaza, fue dado a conocer al público, los medios estuvieron histéricos mencionando fragmentos de  minutos filtrados de la reunión del Gabinete Diplomático de Seguridad. Es usar las filtraciones para dar una paliza al Primer Ministro Benjamín Netanyahu, al entonces Ministro de Defensa Moshe Ya’alon y otros encumbrados oficiales militares, incluyendo al Jefe de Personal de las Fuerzas de Defensa de Israel y al director de la Inteligencia militar.

Las voces que lideran el discurso público en Israel esta semana resonaron con dudas sobre el discurso icónico de David Ben Gurion que declaro: “Que toda madre judía sepa que ha puesto el destino de su hijo en manos de un comandante que es valioso en su tarea’’. Algunos también sugirieron que hemos puesto el destino de nuestro hijo en manos de líderes nacionales poco valiosos.

El interés público en el reporte del Controlador del Estado sobre la Operación Margen Protector  se focaliza en dos cuestiones centrales. La primera busca entender cómo es que el gobierno empujó al país a la guerra con Hamas en el verano de 2014. ¿Fue esa campaña militar realmente necesaria? La segunda quiere una explicación para lo que parece una afrenta al orgullo nacional: ¿Cómo nos encontramos nosotros como nación y como fuerza militar mal equipados para tratar  con la amenaza de Hamas y sus túneles del terror?

Uno debe señalar que el establishment de la defensa estaba focalizado en las dos preguntas en el momento que terminó la lucha  y no se buscó adjudicar responsabilidades. Las Fuerzas de Defensa de Israel, la agencia de seguridad del Shin Bet, el Gabinete Diplomático de Seguridad estaban familiarizados con la amenaza de los túneles mucho antes del verano de 2014 y el informe del controlador los cita con frecuencia.

El asunto que necesita ser revisado en profundidad es: cómo la amenaza fue percibida y entendida y qué se hizo como resultado de esas percepciones.

Esta es una pregunta seria, pero el discurso del público fue transformado por los minutos filtrados de las reuniones de gabinete, confeccionados para manipular la imagen política de ciertos individuos cuando el público viene a juzgar a los que ya anunciaron la situación, los que querían luchar y los que se conformaban arrastrando sus pies.

Cualquier persona entiende que las discusiones de gabinete sobre fatídicos asuntos nacionales debe hacerse a puertas cerradas para mantener su  integridad y mantenerlas libres de los intereses puramente personales. Por algo esas discusiones son una prueba a responsabilidad nacional última. Sin  embargo siempre está la preocupación que alguien se salte los protocolos de silencio con el objetivo de formar la opinión o en un intento de caer del lado correcto de la historia.

Yo no leí el informe de Shapira completamente y es muy temprano para juzgar sus hallazgos. Yo creo sin embargo que hay para preguntar, como el controlador del estado señaló, preguntas sistémicas, como que pudo evitarse la guerra de 50 días. Muchas guerras en la historia pudieron evitarse y el gobierno pudo haber evitado la Operación Margen Protector.

La Segunda Guerra del Líbano en el verano de 2006, por ejemplo, pudo haber sido evitada  si el gobierno no hubiera decidido montar una respuesta a gran escala en respuesta al secuestro de soldados de las Fuerzas de Defensa de Israel Ehud Goldwasser  y Elad Regev por Hezbollah. La decisión de lanzar una campaña militar es una decisión fundamental que muchas veces presenta a un líder con su más grande desafío y muestra su verdadera soledad en esta juntura crucial.

La cuestión del derecho de ir a una guerra siempre permanece en el fodo, aun cuando el proceso de decisión se siga por el libro. Trasciende la autoridad técnica del controlador estatal y a cualquier comisión de consulta.

Revisiones del foco técnico de una campaña militar, como el funcionamiento de las armas o el mal funcionamiento de las mismas, inventarios, competencia de la fuerza, etc. sigue metodologías designadas para identificarla causa del error. Cuando se revisan decisiones estratégicas, sin embargo, la investigación no puede focalizarse en aspectos técnicos.

Pasadas comisiones de consulta convocadas por el Parlamento, como la Comisión Agranat que investigó los errores militares que llevaron a la Guerra del Yom Kippur en 1973 y la Comisión Winograd que revisó las acciones militares durante la Segunda Guerra del Líbano, operaron según la premisa moderna que si algo iba mal uno de los individuos de la cadena de mandos tuvo que haber sido negligente.

El enfoque moderno a muchos asuntos es esperar que uno pueda controlar los acontecimientos que nos rodean, también la guerra. Pero la guerra es   naturalmente caótica e involucra lo desconocido. Esto es porque la inteligencia militar sorprende, como también en una crisis en  asuntos de la dirección que surgen durante épocas de guerra, llevan a auditar el conflicto. Si solo supiéramos quien está en falta, podríamos reemplazarlos y volver a ganar la paz de nuestro pensamiento.

Entonces… ¿Cómo toman decisiones los contralores en cuestiones estratégicas? La prueba está en donde está el resultado. En un partido de futbol, el resultado final es claro. Pero las guerras son diferentes y su resultado puede ser visto si determinamos que  sus logros pasan la prueba del tiempo. Cuando se refiere a la guerra, los resultados pueden estar lejos de estar claros años después.

Desde el punto de vista profesional, los auditores buscan discernir cuales eran los objetivos de la guerra y cuáles de ellos se lograron en tiempo. Esta es una compleja cuestión que depende de varios criterios. Tendemos a focalizar las revisiones sobre procesos de  decisiones estándar, adecuados. Este enfoque asume que los procesos correctos necesariamente otorgan decisiones correctas.

Desafortunadamente, esta asunción no resiste un chequeo con la realidad. Esto no disuade a los abogados del propio gobierno de demandar adherencia al trabajo estructurado de los procedimientos, especialmente cuando se trata de preguntas cruciales como lanzar una guerra.

Comisiones de consulta            Las comisiones de consulta y los auditores muy a menudo focalizan el proceso: ¿Cuando se reunió el Gabinete? ¿Qué dinámicas caracterizaron el debate? Que informaciones fueron presentadas a los ministros? ¿Estuvieron presentes los mejores expertos del Forum? Y más.

El sector público. El sector público se comprometió a pensar en cuestiones legales y en materias que conciernen a la guerra. Esto ha causado que el discurso público se focalice  sobre los procedimientos en vez del fondo

El liderazgo del país y los militares no están exentos de  estar preparados y de encontrase con desafíos  fatídicos, al contrario. Pero primero debemos examinarnos a nosotros mismos como sociedad y revisar las expectativas exageradas que ostentamos en procesos y procedimientos cuando se trata de dirigir los asuntos de estado.

La guerra es por definición un evento en el cual se puede perder el control. Aquellos que buscan usar investigaciones como medio para transformar la guerra en un evento dirigido de acuerdo a un predeterminado trabajo en línea como si estuviéramos en una línea de producción están tratando de determinar la naturaleza de un bebé antes de ser concebido. También en tiempos modernos, no podemos controlar todo.

A mi mejor juicio, como miembro de las Fuerzas de Defensa de Israel a este tiempo y como alguien que reviso la Operación Margen Protector en las semanas que siguieron a su conclusión, la prudente y responsable manera en la cual fue dirigida por el liderazgo político y militar merece la plena confianza del público.

 

****El Mayor General (r.e.) Gershon Hacohen es un investigador senior asociado al Begin-Sadat Center for Strategic Studies. El sirvio en las Fuerzas de Defensa de Israel por 42 años, comandando tropas en batalla en los frentes de Egipto y Siria. El fue comandante de cuerpo y comandante de los colegios militares de las Fuerzas de Defensa de Israel.

Esta es una versión editada de un artículo que apareció en Israel Hayom el 27 de enero de 2017.

 

 

 

 
Comentarios

Mas allá de las que se libran sobre el terreno por médios convencionales, existen «otras guerras» soterradas, que planean sobre la paz de los pueblos, (en este caso de Israel) y son aquellas que sus enemigos diseñan desde el anonimáto, tejiendo dia a dia el entramado que dará soporte a la accion directa, ya sea a traves de un ataque terrorista, ya por medio de una accion bélica a gran escala …
Los dirigentes «palestinos» jamas se plantearon la paz como una opcion verdadera, aludiendo a ella tan solo a modo propangandístico, como méra estratagéma publicitaria y mediatica …
Su concepto de «paz» queda reducido a la desaparicion pura y simple de Israel, lo que equivale a decir, a la eliminacion del antagonista, núnca a la resulta de un acuerdo con él … tengamoslo claro de una vez !!!

Deja un comentario

Debes estar conectado para publicar un comentario. Oprime aqui para conectarte.

¿Aún no te has registrado? Regístrate ahora para poder comentar.