Corbyn y la Primer Ministro Theresa May (foto AP)
Traducido para PorIsrael por Yetty Blum
En otra controversia antisemita, el Partido Laborista del Reino Unido es acusado de albergar antisemitas después que un orador en uno de sus eventos marginales acusó a Israel de genocidio, comparó a los sionistas con los nazis y dijo que la negación del Holocausto debería ser debatida
El Partido Laborista británico está nuevamente envuelto en un escándalo antisemita después que un orador en una conferencia marginal laborista llamó a expulsar a judíos y grupos pro-israelíes del partido, los comparó con los nazis y dijo que la negación del Holocausto debería ser el tema de un debate legítimo.
Al hablar sobre este evento, el escritor israelí-americano Miko Peled -un renombrado y autoproclamado antisionista- dijo que lo que los críticos llaman antisemitismo es en realidad «libertad de expresión, libertad de criticar y discutir cada tema, ya sea el Holocausto: sí o no, Palestina, la liberación, todo el espectro. No debería haber límites en la discusión «.
Luego, explicando por qué cree que los oradores pro-Israel no deben tener la oportunidad de expresar su opinión en las reuniones del partido, Peled los comparó con los nazis y preguntó a los asistentes si ellos también deberían haber recibido una plataforma.
«Se trata de los límites de la tolerancia, no invitamos a los nazis y les damos una hora para explicar por qué tienen razón», dijo. «No invitamos a los racistas de Sudáfrica del apartheid a explicar por qué el apartheid era bueno para los negros, y de la misma manera no invitamos a los sionistas, es un tipo muy similar de cosas».
Otros oradores también fueron escuchados declarando a Israel un estado de apartheid e incluso afirmando que el «Estado Sionista» es responsable del genocidio del pueblo palestino. Estas reclamaciones fueron generalmente recibidas con aplausos.
El vice-líder del Partido Laborista, Tom Watson, denunció el hecho y dijo que estaba «disgustado» por las declaraciones de Peled.
«No tiene nada que ver con la conferencia oficial del Partido Laborista, y si hubo negación del Holocausto allí, estas personas no tienen derecho a estar en el Partido Laborista, y si son ellos deberían ser expulsados», dijo Watson a Good Morning Britain de ITV.
«Es asqueroso negar el Holocausto», agregó. «Estas personas son maníacos, no tienen ningún papel en la corriente principal de la política y ciertamente no los quieren en el Partido Laborista».
En respuesta a la declaración de Watson, Peled dijo que él no es un miembro del Partido Laborista y añadió que nunca negó el Holocausto, twitteando: «Oh chico, la libertad de expresión es ahora antisemitismo también … @UKLabour debería saberlo mejor. »
En un segundo tweet, Peled escribió: «¿Qué es peor, discutir el Holocausto -que ya sabemos que ha ocurrido o la complicidad con el genocidio en Palestina?» Luego, en un tercero, añadió: «El sofocante debate desacredita los recuerdos de millones asesinados por Hitler, ¿Por qué los sionistas tienen miedo de la libertad de expresión?»
Las organizaciones judías ya están atacando al presidente del partido, Jeremy Corbyn, que es conocido por sus puntos de vista pro palestinos y por llamar «amigos» a Hezbollah y a Hamas. La disputa fue especialmente embarazosa para el líder laborista, ya que se produjo días antes que su partido planease aprobar una norma significativa para endurecer su postura sobre el antisemitismo y otras formas de prejuicio.
Según el periódico británico The Guardian, la delegada de Hastings y Rye, Leah Levane, miembro de la Voz Judía Antisionista para el Laborismo, atacó el nuevo gobierno del Partido Laborista, alegando que las acusaciones de antisemitismo fueron expresadas porque las personas criticaban «las despreciables acciones del gobierno israelí contra el pueblo palestino «.
El partido local de Levane propuso una alternativa a la nueva regla, que describiría al antisionismo como «discurso político legítimo» que no debería ser considerado antisemita, pero retiró su propuesta porque «la presión es demasiado grande» en contra de ella, agregando que no quería que su grupo fuera considerado divisivo.
Sin embargo, los problemas de Corbyn no terminaron allí, ya que fue rechazado por saltarse un evento israelí en la conferencia Laborista.
De acuerdo con Sky News, el embajador de Israel en el Reino Unido, Mark Regev, criticó la decisión de Corbyn de no presentarse en un evento de Amigos del Trabajo de Israel el martes, sobre todo porque ocurrió pocos días después del escándalo antisemita en el evento marginal.
A los asistentes al evento se les dijo que Crobyn no estaba asistiendo al evento con el fin de prepararse para su discurso de conferencia el miércoles. Sin embargo, las fotos revelaron más tarde que Corbyn en su lugar asistió a una fiesta de Daily Mirror, donde los ministros de Trabajo fueron vistos cantando karaoke.
La presidente de la Comisión para la Igualdad y los Derechos Humanos, Rebecca Hilsenrath, comentó sobre el escándalo: «El antisemitismo es racismo y el Partido Laborista necesita hacer más para establecer que no es un partido racista. Un enfoque de tolerancia cero al antisemitismo debería significar exactamente eso.
«Estos comentarios de los miembros del partido demuestran que hay que hacer más para erradicar las opiniones antisemitas que claramente existen en el partido.» Cualquier sugerencia de expulsar a la gente de cualquier partido político en las áreas de la raza o la religión debe ser condenado”.
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