Paren de ‘comprender’ a los palestinos

Abbas. Una víctima del increíble éxito de la propaganda palestina (Foto: AFP)

Traducido para Porisrael.org por Dori Lustron

Mirar un conflicto requiere que comprendamos los diferentes lados, que comprendamos el dolor pero cuando se trata de los palestinos, cuanto más los entendemos, más reforzamos su rechazo y perpetuamos sus delirios.

El discurso fue fuerte y claro. No fue solo la maldición  «que tu casa sea demolida», sino que el presidente palestino, Mahmoud Abbas, disparó contra el líder de la potencia mundial más fuerte. Fue una ideología completamente delirante, con afirmaciones falsas que solo hacen que los palestinos se hundan más en el camino de los delirios y el colapso.

Las reacciones fueron predecibles: tenemos que entenderlo. Él está bajo mucha presión. Él no tiene horizonte político. Los palestinos están desesperados. Él realmente no lo decía en serio.

Debemos admitir que Abbas es simplemente una víctima del sorprendente éxito de la máquina de propaganda palestina. Durante décadas, esta máquina está siendo promovida por un sistema de propagandistas bien engrasados ​​que siguen explicando que debemos entender a los palestinos.

Cuando se lanzaron cohetes desde Gaza, Robert Fisk, considerado uno de los principales expertos británicos en Medio Oriente, se apresuró a explicar que «los palestinos en Gaza pueden decir en muchos casos, ‘Bueno, mi nieto está disparando un cohete contra mi ciudad porque antes de 1948 estas áreas habrían sido propiedad palestina «.

El profesor Oren Yiftachel de la Universidad Ben-Gurion explicó que el lanzamiento de cohetes debe verse «como un intento de recordar al mundo, a Israel y también a los líderes palestinos, que el problema de los refugiados sigue vivo y coleando».

Están en contra del terrorismo, pero están proporcionando justificaciones para el terrorismo. Alemanes han sido expulsados ​​de muchos países también. Y polacos. Y los húngaros. Y los ucranianos. Y Turcos. Y griegos. Y muchas otras personas. Decenas de millones. Sin embargo, no hemos escuchado sobre el lanzamiento de cohetes, y definitivamente no hemos escuchado justificaciones para el terror de los cohetes. Porque la mayor parte de Europa se habría convertido en un espectáculo de fuego y llamas y fuegos artificiales. Pero esa es la racionalidad que se ha apoderado de las elites progresistas en el contexto israelí-palestino. Irracionalidad, quiero decir.

Y así continúa. ¿Rechazaron el plan de partición? Gente pobre. ¿Por qué alguien daría una habitación en su casa solo porque fue invadida? Esa es una justificación que escuché miles de veces.

Es cierto que cuando comenzó el sionismo, no había un «hogar palestino». Y es cierto que el Fondo de Exploración de Palestina (FAP), que produjo los mapas más precisos del siglo XIX en la década de 1970, descubrió que el área estaba poco poblada. Y es cierto que la mayoría de los palestinos de hoy llegaron como trabajadores inmigrantes o refugiados de países cercanos en los últimos siglos (la familia Zoabi, por ejemplo, llegó por invitación del gobierno otomano en 1873). Y es cierto que el ministro del Interior de Hamas, Fathi Hamad, admitió que los palestinos son en realidad egipcios y sauditas.

Pero al diablo con los hechos, siempre y cuando Abbas pueda citar a docenas de expertos, periodistas y académicos que proporcionan material de incitación y propaganda para cada discurso delirante que hace.

Cuando «entendemos» las afirmaciones sobre la Nakba, en lugar de decir que lo que le sucedió a los palestinos le pasó a decenas de millones de personas, perpetuamos el derecho a la ilusión de retorno (Foto: AFP)

Mirar un conflicto, cualquier conflicto, requiere que comprendamos los diferentes lados para entender el dolor. Pero lo que se aplica a cada conflicto parece estar completamente equivocado cuando se trata de los palestinos. Cuanto más los comprendemos, más reforzamos su rechazo.

Cuando «entendemos» sus afirmaciones sobre la Nakba, en lugar de decirles que lo que les sucedió pasó a decenas de millones de personas, y le sucedió a judíos, incluso de países árabes, perpetuamos la ilusión del derecho al retorno.

Durante años, han estado escuchando el mismo canto de los Fisks y los Yiftachels. Y si eso es lo que la gente educada e ilustrada del mundo tiene que decir ¿Hay alguna posibilidad que los palestinos mismos abandonen la fantasía del derecho al retorno? ¿Este es el «entendimiento» acerca las posibilidades de paz y reconciliación? ¿O, lo aleja?

Cuando, por el bien de este «entendimiento», dicen que debemos comprender lo que Jerusalén significa para los musulmanes en general y para los palestinos en particular -aunque Jerusalén permaneció marginal y descuidada bajo el dominio musulmán durante siglos- están ayudando a inflar la mentira. Y cuando extienden la mentira que los palestinos viven bajo una opresión, que es similar a lo que sucedió en Auschwitz, es un libelo de sangre. Porque bajo el gobierno israelí, los palestinos han experimentado un gran crecimiento en todas las áreas posibles.

Y no, el terrorismo no está justificado, porque los palestinos han recibido reiteradamente propuestas decentes para llegar a un acuerdo. Podrían haber ganado la independencia. Ellos son los que han dicho que no. Y aquellos que siguen justificándolos están justificando la continuación de la violencia y el terror.

La opinión pública en el mundo libre es influyente. Puede y debería haberles dicho a los palestinos e Israel: quítate de encima tu caballo. No más fantasías. No habrá retorno de los palestinos a Israel ni retorno de judíos a cada colina en Judea y Samaria. Pero el entendimiento hacia los palestinos debe detenerse, no para evitar un acuerdo, sino por el contrario, para darle una oportunidad.

https://www.ynetnews.com/articles/0,7340,L-5072291,00.html