Traducido para Porisrael.org por Dori Lustron
- En lo que respecta a Abbas y otros palestinos, las medidas de seguridad de Israel en respuesta a los ataques terroristas también son un «crimen». En otras palabras, están diciendo que Israel no tiene el derecho de realizar una persecución en caliente después que los terroristas se esconden en ciudades palestinas o en campos de refugiados.
- Sin embargo, cuando se trata de las acciones de los propios líderes palestinos, ven una total inocencia. Para ellos, la incitación diaria contra Israel y los judíos no es un «crimen». Para ellos, la glorificación de los terroristas y el pago de salarios a sus familias no es un «crimen». Para ellos, el asesinato de una mujer embarazada en una parada de autobús no es un «crimen».
- Tales mensajes están llevando a los palestinos a los brazos abiertos de Hamas. Si le está diciendo a su gente que Israel y los judíos son criminales, y que cualquiera que haga negocios con ellos o los visite es culpable de un «crimen», les está diciendo que Hamas está en lo cierto: los palestinos deben buscar la destrucción de Israel, no la paz con ella.
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La palabra favorita de los líderes de la Autoridad Palestina (AP), y probablemente la más utilizada, en las últimas semanas es «crimen». Esta es la palabra que el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, y sus altos funcionarios en Ramallah han respaldado como parte de su campaña de incitación contra Israel. Casi todas las declaraciones emitidas por el liderazgo palestino con respecto a Israel incluyen la palabra «crimen».
Para Abbas y sus funcionarios, casi todo lo que Israel hace o dice es un «crimen».
ّ En su mundo, la construcción de unidades de vivienda para judíos en Cisjordania o Jerusalén es un «crimen».
Según la lógica de Abbas y sus funcionarios palestinos, el asesinato de un terrorista palestino que asesinó a dos de sus colaboradores judíos y la posterior demolición de su casa por parte de Israel es un «crimen».
En lo que respecta a Abbas y otros palestinos, las medidas de seguridad de Israel en respuesta a los ataques terroristas también son un «crimen». En otras palabras, están diciendo que Israel no tiene el derecho de realizar una persecución en caliente después que los terroristas se esconden en ciudades palestinas o en campos de refugiados. Cada vez que el ejército israelí ingresa a una ciudad palestina para arrestar a un terrorista, los palestinos gritan «crimen».
Las visitas de judíos al Monte del Templo en Jerusalén han sido mejoradas por Abbas y sus funcionarios de un «crimen» ordinario a, en palabras de un funcionario, un «crimen infernal».
Ellos y otras facciones palestinas, incluido, por supuesto, Hamas, han llegado a condenar el establecimiento de Israel como un «crimen».
En consecuencia, la facción gobernante Fatah de Abbas, que a menudo es descrita por los medios de comunicación internacionales como «moderada», también considera la Declaración de Balfour de 1917, que anunció el apoyo del gobierno británico al establecimiento de un «hogar nacional para el pueblo judío» en Palestina, como un «crimen de lesa humanidad».
En las últimas semanas, la lista de «delitos» del liderazgo palestino ha crecido para cubrir otros asuntos.
A los ojos de Abbas y sus principales funcionarios, una reciente visita de periodistas árabes a Israel no solo es un «crimen inaceptable», sino también un pecado político y nacional. Estas son las palabras utilizadas por el Ministerio de Información de Abbas para condenar a siete periodistas árabes radicados en Europa por aceptar una invitación para visitar Israel.
La semana pasada, la facción de Fbas Fatah de Abbas respaldó una declaración emitida por un grupo llamado Fuerzas Islámicas y Nacionales que llamó a boicotear un centro comercial israelí-palestino en Jerusalén oriental y advirtió a los palestinos que la «normalización económica» con Israel era un «crimen», un acto de «traición intencional».
El Fatah de Abbas también considera las transacciones de bienes raíces con los judíos como un «crimen». Para Abbas y sus representantes, cualquier palestino involucrado en la venta de propiedades a judíos es un «criminal» y un «traidor». Este «delito» conlleva una sentencia de muerte.
Por lo tanto, vemos que Abbas y sus amigos consideran que todo lo relacionado con Israel y los judíos es un «crimen». No quieren que los palestinos hagan negocios con los judíos; no quieren que los palestinos vendan propiedades a los judíos, y no quieren que los árabes que creen en la convivencia y la paz visiten Israel. Todas estas acciones, según el liderazgo palestino y sus partidarios, son «crímenes» por los cuales las personas deberían ser castigadas.
Sin embargo, cuando se trata de las acciones de los propios líderes palestinos, ven una total inocencia. Para ellos, la incitación diaria contra Israel y los judíos no es un «crimen». Para ellos, la glorificación de los terroristas y el pago de salarios a sus familias no es un «crimen». Para ellos, el asesinato de una mujer embarazada en una parada de autobús no es un «crimen». Para ellos, privar a su gente de la ayuda internacional y acabar con las libertades públicas de Abbas en Cisjordania y Hamas en la Franja de Gaza no es un «crimen».
El uso diario de la palabra «crimen» para condenar a Israel se da en el contexto del esfuerzo continuo de los palestinos por deslegitimar a Israel y demonizar a los judíos. Esto no es una nueva política. Abbas y sus compañeros han estado librando una campaña de odio e incitación contra Israel, una que apunta a representar a israelíes y judíos como «delincuentes» y «asesinos». Esa es la razón principal por la que se ha vuelto casi imposible encontrar un palestino que esté dispuesto a aceptar cualquier forma de conmoción o compromiso con Israel. Esta campaña es también la razón principal por la que Hamas se ha vuelto muy popular entre los palestinos, como lo mostró la última encuesta de opinión pública publicada la semana pasada.
Los líderes palestinos bombardean a su gente con el siguiente mensaje: Todos los israelíes son criminales. Todos los israelíes son culpables hasta que se demuestre lo contrario. El establecimiento de Israel es un crimen. Las medidas antiterroristas de Israel son un crimen. Las manos de los palestinos, por el contrario, son lirio blanco.
Tales mensajes están llevando a los palestinos a los brazos abiertos de Hamas. Si le está diciendo a su gente que Israel y los judíos son criminales cuyas manos gotean sangre, y que cualquiera que haga negocios con ellos o los visite es culpable de un «crimen», les está diciendo que Hamas está en lo cierto: los palestinos deberían estar buscando la destrucción de Israel, y no la paz con ella.
Bassam Tawil es un árabe musulmán radicado en el Medio Oriente.
https://www.gatestoneinstitute.org/13472/palestinians-crimes
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