Régimen de Assad llama a la resistencia popular para expulsar a las fuerzas estadounidenses de Siria

En las últimas semanas, los sirios se han pronunciado en un tono más severo hacia la presencia militar estadounidense en el país, luego que la administración Trump, que había comenzado a retirar sus tropas de Siria, declaró que algunas de ellas permanecerán al este de Siria para proteger los campos petroleros y de gas en el lugar.[1] El tono cada vez más agresivo se hizo notable, especialmente después de que el Presidente Bashar Al-Assad declarara en entrevistas que la continua presencia de las tropas estadounidenses encontraría una resistencia militar popular que finalmente los obligaría a irse. Los artículos publicados en la prensa estatal y pro-régimen enfatizaron que los sirios son capaces de librar tal resistencia popular contra el ocupante estadounidense e infligir muertes que los llevarían a su retirada de Siria.

Esta no es la primera vez que han aparecido llamados a la resistencia popular contra las fuerzas estadounidenses en la prensa siria. En el pasado, incluso fue informada la creación de milicias populares para este propósito,[2] aunque sus actividades han sido insignificantes.

Este informe revisa algunas de las declaraciones y artículos publicados recientemente sobre este tema.

Tropas estadounidenses pasan por una valla publicitaria con un retrato de Assad en la provincia de Hasakah al este de Siria (Fuente: Arabi21.com, 27 de octubre, 2019)

Assad: La presencia estadounidense en Siria se encontrará con una resistencia popular respaldada por el régimen que le causará muchas pérdidas a los estadounidenses

En una entrevista realizada el 31 de octubre, 2019 en la televisión siria, Assad dijo, en respuesta a una pregunta sobre su postura a la presencia militar de Estados Unidos en Siria: «Después de que terminemos [de liberar] al resto de las regiones, de acuerdo al orden de prioridades y vengamos a liberar un área donde los estadounidenses se encuentran presentes – no me jactaré y diré que enviaremos al ejército para enfrentar a los Estados Unidos, siendo después de todo esta una superpotencia. Pero ¿tenemos nosotros alguna otra opción? Para nosotros, los sirios, tenemos muy claro el tema: ¿avanzaremos en dirección a la resistencia? Si hay resistencia, el destino de los estadounidenses será como lo fue en Irak. Pero la noción de resistencia requiere de una [base de apoyo] popular… una de orden patriota, que llevará a cabo la resistencia por sí misma. El papel natural del estado en esta situación es preparar el terreno y proveer todo el respaldo necesario para la resistencia popular en contra de la entidad ocupante».[3]

En una entrevista realizada el 15 de noviembre con las agencias de noticias rusas, Assad habló de manera similar, diciendo: «La presencia de Estados Unidos en Siria generará una resistencia militar que infligirá pérdidas a los estadounidenses y por lo tanto, hará que se marchen… Estados Unidos no puede esperar y cruzarse de brazos en todas las áreas que este ocupa. Recordemos a Irak y Afganistán. Siria no es ninguna excepción en este contexto».[4]

En respuesta a las declaraciones de Assad, el Jeque Haider Al-Hammadi, miembro del Foro de Tribus Sirias pro-Assad, dijo que «las tribus árabes al noreste [de Siria] están listas para cumplir su papel nacional estableciendo la así llamada resistencia popular, en la que el ejército tribal será un componente central para confrontar a los ocupantes estadounidenses y turcos… Muchos miembros de la tribu han expresado su voluntad de mantener contactos con el gobierno de Damasco para comenzar las actividades de resistencia allí [al noreste de Siria]… El deseo de la resistencia popular no se limita a las tribus allí, sino que [es compartida por] todos los componentes del pueblo sirio: árabes, kurdos, asirios, caldeos y otros, ya que la identidad siria los une a todos, y el enemigo es uno solo».[5]

Artículos en la prensa siria: Los estadounidenses pagarán con su sangre en Siria; haremos de sus vidas un infierno

Tal como se dijo, las amenazas para atacar a las fuerzas estadounidenses y los llamados a la resistencia popular contra ellos también aparecieron en editoriales en la prensa siria. Muhriz Al-‘Ali, columnista del diario del gobierno Al-Thawra, enfatizó que «el camino de la resistencia está muy dentro del corazón de cada sirio, tal como lo demuestra su legendaria firmeza en la guerra global [que se libró] contra Siria durante ocho años y desde su frustración a las conspiraciones de sus enemigos, que malgastaron cientos de millones de dólares tratando de derrocar a Siria, pero todo fue en vano. Las piedras arrojadas por los civiles [sirios] a los convoyes de los invasores estadounidenses mientras se retiraban del norte de Siria indican que los sirios no aceptan a los invasores, sino que se adhieren a [la opción de la] resistencia a fin de expulsarlos… La presencia de las fuerzas invasoras, ya sean turcas o estadounidenses, en algunas partes de Siria, con el objetivo de robarse nuestro petróleo y otros recursos les costará sangre, porque nuestra tierra nos pertenece y [a ellos] se les prohíbe [quedarse aquí]. El pueblo, que está decidido a mantenerse firme, resistir y liberar [la tierra], muy seguramente triunfará. Los triunfos y logros en el terreno demuestran que estamos en el camino hacia una gran victoria de purgar a Siria de la inmundicia de los terroristas e invasores».[6]

Otro columnista en el diario Al-Thawra Nasser Mundhir atacó a los Estados Unidos y a Turquía, que controla partes de Siria, escribiendo: «Además de la amenaza turca, vemos al ocupante estadounidense reforzando sus tropas de ocupación y estableciendo nuevas bases de ocupación para controlar los campos petroleros, evitar que Siria recupere el control de estos y obstruir el despliegue del ejército árabe sirio a lo largo de la frontera turca. Aquí la coordinación estadounidense-turca es claramente visible, [y está coordinación presiona] para intensificar la agresión [en contra de Siria], en una maniobra destinada a chantajear a Siria y a Rusia. Esto tiene como objetivo obtener logros [sobre el terreno que puede ser aprovechados]… en cualquier negociación futura con el fin de realizar una solución política integral [en Siria], especialmente porque los ocupantes estadounidenses y turcos saben muy bien que eventualmente se retirarán [de Siria].

«[Sin embargo], en la próxima fase veremos la aparición de nuevas reglas en el conflicto, que no necesariamente favorecerán a la asociación terrorista estadounidense-turca, incluso si [Estados Unidos y Turquía] continúan su agresión conjunta. Siria posee muchas formas para convertir la estadía de las fuerzas de ocupación estadounidenses y turcas en una [situación] infernal que se disparará en su contra, mediante estallidos de resistencia popular contra estas dos entidades ocupantes. Después de todo, la historia siria está repleta de victorias contra todas las fuerzas de ocupación».[7]

Escritor libanés: La resistencia popular le enseñará a los estadounidenses que el petróleo sirio les costará sangre

Escribiendo en el diario libanés Al-Binaa, el analista estratégico libanés Amin Muhammad Hatit, conocido por sus puntos de vista pro-Assad, también se refirió a la opción de la resistencia popular contra los estadounidenses: «Claramente, una confrontación con la ocupación estadounidense no buscará ‘destruir al ejército estadounidense’. Su objetivo será infligir dolor dentro de sus filas y cobrar un alto precio por la ocupación, en la medida que establezca la ecuación ‘petróleo por sangre’. Esta es una ecuación que los estadounidenses no podrán tolerar. Esta hace que el precio por la ocupación sea muy alto y los obligará a retirarse. ¿Es posible tal resistencia hoy? La resistencia se forma en concordancia a las leyes generales de confrontar a la ocupación y continuar hasta que esta logre sus objetivos en el área dada, siempre que se cumplan tres condiciones. La primera… es la aparición de una célula de la resistencia que está lista para la confrontación y el sacrificio. La segunda es la existencia de un entorno de apoyo que ayuda a esta fuerza, la protege y la cultiva. La tercera es la existencia de una fuerza de apoyo fuera del ámbito de operaciones que provee ayuda financiera y moral. En el caso de Siria, estas tres condiciones actualmente se cumplen: Células de resistencia pueden formarse entre los sirios que ganaron experiencia de combate en la guerra general siria, o entre otros sirios en el área ocupada y sus alrededores en la que pueden aprender de la experiencia de sus aliados en el eje de la resistencia. En cuanto al medio ambiente, este actualmente se encuentra en una fase de recuperación nacional, especialmente ante las posturas recientemente adoptadas por los líderes tribales. En cuanto al elemento de asistencia y apoyo, lo provee el estado sirio y sus aliados en el eje de la resistencia. Todos ellos poseen una experiencia adecuada en apoyar a la resistencia, [ya sea] en el sur del Líbano, del cual el ocupante israelí fue expulsado en el año 2000, o en Irak, del cual el ocupante estadounidense fue expulsado en el 2011…

«Siria, que ha ganado esta guerra, ha elegido el momento adecuado para decirle a Estados Unidos, el líder agresor: Ahórrense las pérdidas y ser derrotados directamente. Márchense de nuestra tierra y dejen de robar nuestros recursos, o de lo contrario aténganse a las consecuencias. Creemos que los estadounidenses entenderán el mensaje de los sirios y se comportarán de una manera en la que salvarán la vida de sus soldados».[8]

[1] Foreignpolicy.com, 4 de noviembre, 2019.

[2] Véase la serie de MEMRI Despacho Especial No. 7402 – Régimen sirio: Expulsaremos a las fuerzas estadounidenses de Siria a través de la resistencia popular, 28 de marzo, 2018; Despacho Especial No. 7451 – Continúan la amenazas siria a la presencia estadounidense en Siria: Las tropas estadounidenses y sus bases están a nuestro alcance y pagarán caro por ello, 2 de mayo, 2018.

[3] Sana.sy, 31 de octubre, 2019.

[4] Sana.sy, 15 de noviembre, 2019.

[5] Alahednews.com.lb, 17 de noviembre, 2019.

[6] Al-Thawra (Siria), 17 de noviembre, 2019.

[7] Al-Thawra (Siria), 20 de noviembre, 2019.

[8] Al-Binaa (Líbano), 19 de noviembre, 2019.