Por eso, un equipo de 12 estudiantes del Instituto de Tecnología Technion de Israel trabajó durante 2018 en el desarrollo de una “miel sin abejas” producida por la bacteria Bacillus subtilis que «aprende» a producir melaza después de una reprogramación en el laboratorio.

Y sus esfuerzos valieron la pena ya que el equipo obtuvo una medalla de oro en la reciente competencia International Genetically Engineered Machine (iGEM) celebrada en Boston, donde participaron 300 equipos de universidades de todo el mundo.

Esta es la sexta medalla de oro que estudiantes del Technion ganan en iGEM desde que la competencia fue creada en 2004 por el Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT).

Además de enfocarse en el desarrollo de la ciencia, iGEM exige la creación de una empresa comercial real. Así, el equipo del Technion creó su propia página web con el nombre pegadizo BeeFree.

«Nuestra idea es que la miel de BeeFree sea sustentable al utilizar bacterias modificadas para procesar una solución similar a un néctar, con enzimas secretadas que imitan el ambiente del estómago de la abeja cuando produce miel», explican los estudiantes en su página web.

El equipo colaboró ​​con dos empresas de tecnología israelíes: Bio-castle, que fabrica un producto que biodegrada los contaminantes en el agua (fue usado para recolectar las proteínas necesarias para hacer miel sintética) y Tsuf Globus, productor del «miel médica».

Para crear BeeFree, se unieron estudiantes de seis disciplinas diferentes: ingeniería biomédica, medicina, biotecnología e ingeniería alimentaria, gestión industrial e ingeniería, ingeniería química e ingeniería aeroespacial.

Los integrantes del equipo de BeeFree son por Asaf Licht, Lior Haim, Zeinat Awwad, Nir Litver, Mai Dror, Ofri Warsha, Ilan Brajzblat, Oriyet Tibi, Yehonatan Zur, Dor Ben Meir, Shira Levi y Lidya Tannenzapf