Dos veces al año, unos 500 millones de aves migratorias de 300 especies diferentes vuelan a través de Israel en su ruta hacia y desde África, Europa y Asia.
En marzo y noviembre, hay un sitio especial para poder disfrutar este extraordinario espectáculo: se trata del Parque Natural Lago Agamon Hula en la Alta Galilea.
Allí, miles y miles de grullas comunes bajan todos los días a los campos para comer de forma ruidosa y juntar nuevas fuerzas para emprender su largo viaje.
A ellas se les unen otras aves como cigüeñas blancas, garcetas, golondrinas y currucas cabecinegras.
La reserva natural también alberga muchos otros tipos de vida silvestre como nutrías y jabalíes.
Para ver esta maravillas, los visitantes pueden explorar la reserva a pie, alquilar un carrito de golf o alguna bicicleta simple, tándem o triple. También hay visitas guiadas en un camión (hay excursiones diurnas, vespertinas y nocturnas).
En 2020, los observadores de aves en el Valle de Hula estuvieron a punto de disfrutar de un nuevo centro de visitantes ecológico de alta tecnología. La pandemia de COVID-19 no lo permitió.
Luego de una década de arduos trabajos, el centro de visitantes Stephen J. Harper KKL-JNF del Valle de Hula incluye estaciones de realidad virtual de última generación, un muro digital de 18 metros cuadrados controlada por gestos que proyecta la alimentación en vivo de aves migratorias, un modelo digital en 3D del Valle de Hula (actualizado de forma dinámica), un auditorio de 220 asientos equipado con un proyector 4K y más.
Un consejo: llevar binoculares y cámara de fotos. Y si no, disfrutar de las imágenes de la increíble migración.
Para más información, fotos y videos diarios, consultar la página de Facebook de KKL-JNF acerca de Agamon.
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