En un lugar de la bodega Psagot, se puede encontrar una nueva edición de vinos de un año. El «vino Pompeo» surgió como un tributo a la importante declaración del exsecretario de Estado de Estados Unidos que la empresa de asentamientos en Judea y Samaria no viola el derecho internacional. Un año después de hacer esa declaración, Pompeo se convirtió en el primer secretario de estado en visitar Judea y Samaria «. En el libro de visitas de la bodega, escribió:» Que no sea yo el último secretario de estado en visitar esta hermosa tierra «. Había tanta honestidad , sencillez y amor en el hombre que tanto cambió en solo dos años y medio.
En sus últimas semanas como secretario de Estado, Pompeo recurrió a Twitter para expresar la cosmovisión detrás de la política exterior de Estados Unidos bajo el expresidente Donald Trump. Estos tuits, que se cuentan por centenares, arrojan luz sobre la política cuyo principio rector era «Estados Unidos primero». No «Estados Unidos primero» porque Estados Unidos es todo lo que importa. Estados Unidos primero porque un Estados Unidos fuerte y próspero es una condición necesaria para un mundo mejor.
Pompeo se separó del caos y la discordia actuales y resumió el legado que dejaba de una manera lógica, metódica y clara. Colocó a la superpotencia más grande del mundo del lado del bien, luchando contra los malos. Eso puede sonar simplista, pero es un reflejo de la línea simple que se niega a ser políticamente correcta y se niega a jugar ese juego demasiado familiar de sonrisas corteses, premios Nobel de la Paz sin sentido y una sumisión a los matones de todo el mundo. como el que el mundo presenció con la charla del difunto primer ministro británico Neville Chamberlain sobre la «paz en nuestro tiempo» en un momento en el que todo el mundo sabe que la guerra está llamando a la puerta. O como Pompeo lo expresó sucintamente, «las ilusiones no frenarán a los autoritarios en Caracas, ni en Pekín, ni en Teherán».
Y así, más allá de nuestro pedacito de cielo, Estados Unidos se ha revelado en todo su esplendor como un partidario de Hong Kong , Taiwán , y una nación que se enfrenta al partido comunista chino y con los uigures , adopta una política maximista de presión. sobre Irán , lucha contra Al Qaeda, apoya al pueblo iraní y rompe las normas conceptuales fosilizadas en el Medio Oriente que vieron al mundo colgar sus esperanzas de paz en las caprichosas tendencias de los palestinos.
Pompeo tampoco dudó en hablar con total naturalidad sobre los organismos internacionales. «Estados Unidos es más fuerte cuando reconocemos las fallas de instituciones internacionales como @UN y tratamos de arreglarlas», tuiteó, y señaló que Estados Unidos no había malgastado el dinero de los contribuyentes en instituciones fallidas y corruptas como la agencia de la ONU para los refugiados palestinos, la ONU , Organización Científica y Cultural, Organización Mundial de la Salud, y otros.
Fue una de las figuras más importantes de la administración y dejó un legado impresionante. También declaró que «Estados Unidos no tiene mejor amigo que Israel y el pueblo de Israel».
En un mundo honesto y genuino, habría recibido el Premio Nobel de la Paz. Pompeo, sin embargo, no está esperando reconocimiento. Estaba entusiasmado con los Altos del Golán y con Judea y Samaria. Con motivo del final de su mandato, deberíamos levantar una copa de Pompeo fino de los viñedos de Binyamin en su honor.
Traducido para Porisrael.org por Dori Lustron
https://www.israelhayom.com/opinions/a-toast-to-mike-pompeo/
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