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| domingo diciembre 22, 2024

En el aniversario del asesinato del pequeño Daniel Tregerman por un cohete de Hamas, recordemos las tácticas terroristas

Una de sus características : los civiles de ambos lados, rehenes de Hamas.


Este 22 de agosto se cumple un nuevo aniversario de la muy prematura muerte del pequeño Daniel Tregerman, el niño israelí del kibutz Najal Oz que fue alcanzado por un mortero en su casa al no alcanzar a refugiarse. Tenía solamente 4 años. El disparo que lo mató fue efectuado desde una escuela palestina en Bet Hanun.

Es oportuno pues recordar que los civiles a ambos lados de la guerra, eran víctimas del terrorismo de Hamas tanto en aquel momento, el operativo «Margen Protector» que lanzó Israel contra la infraestructura armada de los terroristas en Gaza, como antes y mucho después.

Israel sostuvo a lo largo de todo el  operativo que Hamas se aprovechaba de sus propios civiles como escudos humanos, para disparar entre ellos y desde instalaciones civiles,  hacia la población civil israelí. A este fenómeno se suma otra dimensión: los ataques de Hamas dirigidos contra los pasajes fronterizos entre la Franja de Gaza y el territorio israelí, aunque estos servían-y sirven también hoy-a la población palestina, funcionando exclusivamente para prestar ayuda a los habitantes de Gaza, no a Israel.

Uno de varios ejemplos, en la última semana de agosto: el disparo de varios morteros desde Gaza hacia el pasaje de Erez , en el norte de la Franja, justamente cuando tenían que pasar por allí civiles palestinos heridos, en camino a hospitalización en Israel. A raíz de los disparos, resultaron heridos varios israelíes, tanto judíos como árabes, que habían llegado al puesto de Erez a trasladar a los palestinos hacia los hospitales. Como resultado de ello, Israel tuvo que clausurar el lugar por el día.

Situaciones similares se han dado con ataques al pasaje fronterizo de Kerem Shalom, en el sur de Gaza, por el cual entran diariamente centenares de camiones con ayuda humanitaria desde territorio israelí al lado palestino. En más de una oportunidad, debido a los incesantes disparos hacia el pasaje, efectuados por Hamas a pesar de que es usado para introducir a Gaza medicinas, alimentos y otros productos que la población local necesita, Israel tuvo que cerrarlo.

Por otra parte, un gran tema es el origen de los disparos, o sea los puntos desde los cuales Hamas y otros grupos radicales palestinos abrían fuego, un aspecto clave de la guerra, ya que está claro que la reacción en hostilidades, es responder hacia la fuente de los disparos a fin de intentar eliminar a los responsables de los mismos.

Mucho se solía decir en contra de Israel cuando civiles o instalaciones civiles eran alcanzados por sus disparos.  El problema es que poco y nada se decía contra Hamas, que cargaba con la responsabilidad por disparar desde esos sitios. En toda guerra, en cualquier parte del mundo, cuando la población civil de un lado (o inclusive los militares) sufren una amenaza que los pone en peligro, de un sitio determinado, se la elimina. La responsabilidad de no exponer a gente inocente a esa respuesta, es del lado que dispara: que no lo haga en medio de sus civiles.

Pero Hamas lo hacía en forma intencional, con el evidente deseo de comprometer a Israel cuando reaccionaba, especialmente cuando hay potencial de muertos y heridos entre los civiles palestinos, lo cual en términos de propaganda, a Hamas le viene de perillas. Escribimos en pasado porque estamos recordando aquella guerra de hace cinco años. Pero sus prácticas, Hamas no las ha cambiado.

Según informaciones publicadas por el portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel, Hamas explotó durante todo el operativo instalaciones civiles y médicas para el terrorismo. Se reveló que en el transcurso del operativo, más de 260 cohetes fueron lanzados desde escuelas, más de medio centenar desde instalaciones médicas y más de 130 desde cementerios.

Algunos ejemplos de instalaciones civiles usadas como punto de lanzamiento de cohetes.

–         Un sitio de lanzamiento de cohetes, adyacente a la escuela “Jafar Ari Ibn Taleb” en el barrio Zaitun de la ciudad de Gaza. De allí dispararon hacia el kibutz Najal Oz y mataron a Daniel Tregerman de 4 años. La escuela en cuestión era usada por Hamas como “refugio”..Problemático refugio por cierto, si de allí mismo salen cohetes hacia Israel.

El niño israelí Daniel Tregerman, muerto por un mortero disparado desde una escuela palestina
El niño israelí Daniel Tregerman, muerto por un mortero
disparado desde una escuela palestina

 

–         De dos complejos escolares en Sayaía dispararon por lo menos 36 cohetes hacia Israel.

Ubicación de una escuela en Sayaíe, Gaza, dede la que dispararon hacia Israel. (Imagen: Dover Tzahal)
Ubicación de una escuela en Sayaíe, Gaza, dede la que dispararon hacia Israel. (Imagen: Dover Tzahal)

 

–         Una instalación médica en Sayaíe.

Mapa: Dover Tzahal
Mapa: Dover Tzahal

 

–         Un cementerio en Zaitun

Mapa: Dover Tzahal
Mapa: Dover Tzahal

 

La fuente de esta información no era solamente Israel. También periodistas que cubrieron la guerra desde el lado palestino, entrando en la Franja de Gaza, revelaron parte de la realidad.Claro que salvo rarísimas excepciones, como la de la corresponsal de la televisión de Finlandia, que transmitió desde el propio hospital Shifa de Gaza diciendo que vio el disparo, allí, de un cohete, los demás revelaron sus materiales recién al salir de la Franja.

He aquí algunos ejemplos concretos:

 

–         La Asociación de Prensa de Prensa Extranjera (Foreign Press Asociation) en Israel, publicó en su momento un comunicado en términos categóricos: “La FPA protesta en los más duros términos, los métodos inequívocos, incesantes, coercitivos y no ortodoxos empleados por las autoridades de Hamas y sus representantes, contra periodistas internacionales visitantes en Gaza en el transcurso del mes pasado. No se puede impedir que los medios internacionales reporten, recurriendo a amenazas o presiones, para privar a los lectores y televidentes de un cuadro objetivo de la situación en el terreno”. El comunicado continua: “Hubo varios casos en los que reporteros extranjeros en Gaza fueron acosados, amenazados o interrogados por historias o informaciones  sobre las que informaron a través de sus medios o de las redes sociales. También nos consta que Hamas está intentando imponer un procedimiento de “veto” que haga posible colocar a ciertos periodistas en una lista negra. Este procedimiento es vehementemente rechazado por la FPA”.

 

–          El periodista español freelance Fernando Gutiérrez, publicó en Twitter que Hamas estaba lanzando cohetes desde el hotel de la Prensa en Gaza. “El sábado 9 de agosto, Hamas lanzó una bacteria de cohetes desde el HOTEL de la Prensa”, escribió desde Melilla. “¿Cuál era su intención? ¿Provocar a Israel para matarnos?”. Luego, agregó el audio de los cohetes en el momento de su disparo. En otro tweet en español, este cronista español escribió: “Estaría mintiendo si dijera que vio señales de apartheid en Israel. Pero no voy a mentir”, y publicó una foto de un soldado árabe en el ejército israelí, besando a su madre, que vestía un hijab musulmán.

–         El periodista Pal Jorgensen de  Noruega, escribió:  “Algunos periodistas extranjeros han sido echados de Gaza porque a Hamas no le gusta lo que han dicho o escrito. Hemos recibido instrucciones claras que si vemos a Hamas disparando cohetes, no podemos filmarlos. Y que si lo hacemos, eso tendrá serias consecuencias que pueden llevar a la expulsión de Gaza. Quienes nos ayudan como traductores y con todo por aquí, también estarían en serios problemas si filmamos soldados de Hamas, especialmente cuando lanzan cohetes. Además de eso, está bastante bien trabajar por acá”.

Pueden ver aquí su nota.

–         La periodista holandesa Monique van Hoogstraten: “Desde el comienzo de la guerra, un grupo de la población de Gaza ha desaparecido de las calles: gente uniformada. Trabajan para Hamas y son blancos de Israel. Solamente en el hospital Shifa, el gran hospital de la ciudad de Gaza, hay algunos pocos sentados en uniforme. Allí se sienten protegidos de un bombardeo israelí. Además, es ahí donde monitorean a la Prensa internacional para impedir que haga cosas ´equivocadas´. Equipos de camarógrafos locales lo saben, pero los extranjeros no: Hamas no quieren que combatientes muertos o heridos aparezcan en las filmaciones”.

 

–         La cadena CBN informó en Gaza el 6 de agosto del 2014 que Hamas había usado una iglesia para disparar cohetes hacia Israel. El obispo local, Alexios, llevó al cronista a la terraza fuera de su oficina y le mostró el lugar. Rehusó tratar el tema ante las cámaras por razones de seguridad. En el lugar, el obispo había dado refugio a 1500 musulmanes que huían de los bombardeos.

Pueden ver aquí la nota.

 

–         El periodista Martin Savidge de CNN describió en vivo las tácticas de Hamas de operar entre los civiles. La informativista en el estudio le preguntó si los residentes en las casas cercanas eran conscientes de ello, a lo cual Savidge respondió: “Sería imposible que no sean conscientes cuando cohetes son disparados. Al menos nosotros hemos presenciado el disparo de cohetes. No hemos visto el lanzador mismo, pero uno podía ver el resplandor, se podía ver que era entre edificios, y captar el estruendo de los cohetes en el aire, o sea que uno puede decir claramente que el disparo se hace desde una zona habitada. Lo difícil para la gente es que estos son hombres armados instalando un arma..hay un nivel de temor que puede impedir que alguna gente informe lo que está viendo”.

 

–         El periodista italiano Gabriele Barbati escribió un tweet: “Fuera de Gaza lejos de represalias de Hamas: cohete mal disparado mató niños en Shati. Testigo: militantes corrieron y limpiaron los restos”.

Pueden verlo aquí.

 

–         Patrick Martin, corresponsal de Globe and Mail en Gaza: “La presencia de militantes en Sayaíe se tornó clara el domingo por la tarde cuando, bajo el amparo de la tregua humanitaria destinada a permitir a ambas partes evacuar muertos y heridos, algunos palestinos armados se escurrieron del lugar. Algunos llevaban sus armas abiertamente, colgadas sobre sus hombros, pero al menos dos, disfrazados de mujeres, eran visto caminando con sus armas parcialmente ocultas debajo de sus ropas. Otro tenía su arma envuelta en una manta de bebé y la llevaba sobre su pecho, como si fuera una criatura”.

–         William Booth, Sudarsan Raghavan y Ruth Eglash, escribieron el 17 de julio en Washington Post:

“Durante la tregua, un grupo de hombres en una mezquita en la parte norte de Gaza, dijeron que habían vuelto para limpiar el vidrio de las ventanas destruidas en los bombardeos del día anterior. Pero se los podía ver trasladando pequeños cohetes a la mezquita”.

–         El corresponsal de la televisión France24 TV, también denunció el disparo de cohetes de zonas pobladas por civiles (uno de ellos lo tomó por sorpresa durante una transmisión en vivo a su programa en inglés) , cerca del hotel de la prensa internacional, e inclusive mostró la lanzadera. Además, mostró que a unos escasos 100 metros de una instalación de la ONU, cuya bandera azul se veía claramente flameando, había habido disparos de cohetes.

 

–         El corresponsal del canal NDTV de la India, filmó desde la habitación de su hotel, el emplazamiento de lanzaderas de cohetes y luego el disparo mismo, cerca de allí, mostrando claramente que alrededor del sitio elegido por los hombres de Hamas, hay numerosos edificios de viviendas y también hoteles.

 

En resumen, tras este extenso detalle: Hamas usa sistemáticamente a sus propios civiles y los sitios en los que deberían vivir con normalidad, para atacar desde allí a la población civil israelí, desarrollando una maquinaria mentirosa de propaganda, con la que logró engañar a gran parte de la opinión pública mundial.

El que el último operativo lanzado recientemente por Israel haya sido sólo contra el Jihad Islámico, sin que Hamas participe en el disparo de cohetes hacia Israel, no significa que el tigre haya perdido sus manchas. Hamas está allí y con él habrá que seguir lidiando.

 
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