JTA – El Departamento de Educación de EE. UU. ha abierto 12 nuevas investigaciones sobre el manejo de la discriminación en universidades y distritos escolares desde el Día de Acción de Gracias, en la última expansión del escrutinio del departamento sobre cuestiones de derechos civiles desde el estallido de la guerra entre Israel y Hamas después de Gaza y las masacres del 7 de octubre del grupo terrorista gobernante en la Franja ubicada al sur de Israel.
Al menos cinco (y casi con certeza más) de las nuevas investigaciones están relacionadas con el antisemitismo, que el departamento prometió en octubre combatir en los campus universitarios utilizando todas las herramientas disponibles.
La Universidad de Rutgers, la Universidad de Tulane, el Colegio de Santa Mónica, el Colegio Union y la Universidad Estatal de Montana enfrentan acusaciones de que no respondieron adecuadamente al antisemitismo, confirmaron portavoces de cada una de las escuelas a la Agencia Telegráfica Judía u otros medios.
Un distrito escolar K-12 en Georgia dijo que su investigación no estaba relacionada con el antisemitismo, mientras que otras dos escuelas se negaron a decir a qué se referían sus investigaciones. Varias instituciones importantes, incluidas la Universidad de Stanford y la Universidad de California-Los Ángeles, no respondieron a las solicitudes de comentarios.
Estados Unidos ha visto un fuerte aumento del antisemitismo en las universidades desde que estalló la guerra después del ataque del 7 de octubre en el sur de Israel, cuando 3.000 terroristas liderados por Hamás irrumpieron en la frontera y mataron a 1.200 personas, en su mayoría civiles, y tomaron unos 240 rehenes.
La oficina de derechos civiles del departamento se ha centrado en las quejas relacionadas con el antisemitismo y la islamofobia que alegan violaciones del Título VI, que prohíbe la discriminación basada en varias categorías, incluida la «ascendencia compartida». Desde el 7 de octubre se han abierto más de dos docenas de casos de este tipo, en medio de presión política ante las crecientes preocupaciones sobre el antisemitismo universitario.
Muchos de estos casos del Título VI que involucran acusaciones de discriminación hacia los judíos son presentados por grupos de defensa pro-israelíes, incluido el Centro Brandeis para los Derechos Humanos Bajo la Ley y el Proyecto Lawfare, que a menudo buscan definir el discurso antisionista en espacios universitarios como antisemita.
El departamento ya ha iniciado investigaciones en escuelas como Harvard, Columbia y la Universidad de Pensilvania, cuya presidenta, Liz Magill, renunció recientemente a su cargo tras las consecuencias de su manejo de una audiencia en el Congreso sobre el antisemitismo en el campus. Abrir una investigación no significa que el departamento crea que una queja tiene fundamento.
La agencia no revela detalles sobre las investigaciones que inicia, dejando que las escuelas y los grupos de defensa que puedan estar involucrados en los casos completen los detalles. Pero incluso las propias escuelas dicen que no siempre son inmediatamente conscientes de por qué están siendo investigadas. Un portavoz del departamento de educación señaló un comunicado de prensa de noviembre sobre investigaciones relacionadas con el antisemitismo y la islamofobia como “contexto” para la última ronda.
Un portavoz de la Universidad de Rutgers en Nueva Jersey, que abrió una investigación al respecto el lunes, dijo a JTA que se trataba de “presuntos incidentes de acoso en octubre y noviembre de 2023 de estudiantes por su origen nacional (ascendencia judía compartida y/o Israel).» El portavoz dijo que la escuela no recibió más detalles.
Rutgers anunció esta semana que suspendería su capítulo universitario de Estudiantes por la Justicia en Palestina luego de acusaciones de protestas perturbadoras. La escuela también suspendió brevemente el Colegio de Abogados de Estudiantes de su facultad de derecho el mes pasado después de que intentó acusar a un miembro judío por una batalla en un foro de mensajes sobre Israel y Hamás.
Un portavoz de la Universidad de Tulane en Nueva Orleans, que abrió una investigación el 5 de diciembre, también dijo a JTA que su investigación estaba vinculada a preocupaciones de antisemitismo, específicamente por una manifestación pro-palestina el 26 de octubre celebrada cerca de la universidad en la que cuatro personas no afiliadas a Tulane fueron detenidos y varias personas, entre ellas estudiantes judíos, resultaron heridas.
«El antisemitismo y otras formas de odio no tienen cabida en la Universidad de Tulane», dijo el portavoz Michael Strecker en un comunicado. “El incidente en el centro de esta investigación tuvo lugar en una manifestación organizada por un grupo que Tulane no reconoce. La manifestación se realizó deliberadamente en propiedad pública contigua a nuestro campus pero sobre la cual no tenemos control”.
Strecker agregó que la universidad aumentó la seguridad en el campus y aumentó su propia capacitación en antisemitismo, entre otras medidas, después del incidente, y que “cumpliría plenamente” con la investigación. Un abogado de uno de los estudiantes judíos agredidos en la manifestación dijo al periódico estudiantil de Tulane que «no tenían idea» sobre la investigación.
Un administrador del Santa Monica College dijo a un periódico local que su propia investigación, abierta el 4 de diciembre, también estaba relacionada con el antisemitismo, ya que un consejo de un club estudiantil había negado brevemente el reconocimiento a una sección local de Students Supporting Israel a finales de octubre. Los administradores de la universidad revocaron la decisión al día siguiente, diciendo que no había “base legal” para negar el club. En un comunicado, la universidad dijo al Santa Monica Daily Press: «Esta rápida acción demuestra el compromiso de la universidad con un entorno libre de discriminación para todos los estudiantes».
Y una declaración del Union College en Schenectady, Nueva York, reveló que su propia investigación abierta el 5 de diciembre también involucra acusaciones de “un reclamo de discriminación hacia estudiantes judíos”.
“Específicamente, el denunciante anónimo alega que Union College no respondió adecuadamente a los incidentes de acoso en octubre y noviembre de 2023”, se lee en el comunicado. Continuó diciendo que la escuela “se opone al odio en todas sus formas, incluido el antisemitismo” y “no ha visto violencia ni amenazas de violencia en el campus desde los ataques terroristas del 7 de octubre por parte de Hamás contra Israel”.
En un comunicado, la Universidad Estatal de Montana dijo a JTA que su investigación también está relacionada con el antisemitismo.
El departamento de educación «declara que las cuestiones de investigación son relativas al origen nacional (ascendencia judía), sin ningún detalle específico», se lee en el comunicado de la universidad, y agrega que la universidad «cooperará plenamente» y que la escuela «no ha recibido informes de cualquier amenaza de violencia” relacionada con la guerra entre Israel y Hamas.
Representantes de otras dos universidades, la Universidad de Washington-Seattle y la Universidad de California-San Diego, dijeron a JTA que cooperarían con sus investigaciones, pero no dijeron si las investigaciones involucraban antisemitismo. El distrito escolar del condado de Cobb en Georgia le dijo a un periodista local que la investigación abierta el 5 de diciembre no estaba relacionada con el antisemitismo.
Las solicitudes de comentarios a las otras universidades que también han tenido investigaciones recientes por discriminación no fueron respondidas. Las otras escuelas son UCLA; Stanford; Universidad Whitman; y la Universidad de Cincinnati.
Informes noticiosos recientes de algunas de estas universidades indican que ellas también han sido lugares de conflicto que involucran preocupaciones judías. Una estación de radio conservadora informó que el personal de una oficina de diversidad e inclusión de la Universidad de Washington envió un correo electrónico a estudiantes el 25 de octubre para llamar a Israel “opresores y colonizadores, mientras que Palestina se presenta como oprimida y colonizada”. La carta también acusaba a Israel de “genocidio” y decía: “Apoyamos firmemente la causa de los palestinos y su lucha por la libertad del ilegal y opresivo Estado de apartheid colonial”. Según los informes, la escuela no aprobó la carta y el personal que la envió fue disciplinado.
Un vídeo compartido en las redes sociales de la UCSD en noviembre afirmaba que la universidad había evacuado un edificio en el que estudiantes judíos discutían amenazas antisemitas contra ellos; la universidad negó las acusaciones. El vídeo mostraba a manifestantes pro palestinos reuniéndose fuera de una zona donde se congregaban estudiantes judíos.
En UCLA, los administradores condenaron el mes pasado el lenguaje antisemita hablado por los estudiantes en una protesta pro-palestina en la que los estudiantes golpearon una piñata con una imagen del Primer Ministro Benjamín Netanyahu mientras gritaban a través de un micrófono: “Golpéenle a ese maldito judío”.
Y en la Universidad de Cincinnati, la sección universitaria de Estudiantes por la Justicia en Palestina fue amonestada poco antes de Halloween por una publicación en las redes sociales que promovía un tema de reunión “espeluznante sionista”, según informes locales.
El personal del Times of Israel contribuyó a este informe.
Traducido para Porisrael.org por Dori Lustron
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