Liraz Madmony
**Estudiante de leyes de 23 años de Sderot en la Sesión Especial del Consejo de Derechos Humanos sobre Gaza de la ONU.
Vengo de Sderot, la ciudad de Israel que durante 8 años ha sido aterrorizada por 10.000 misiles disparados contra nosotros desde Gaza.
Como estudiante de leyes aprendí -y creo -que todos los seres humanos tienen el derecho a la paz y la seguridad.
Pero cuando veo la resolución de hoy pregunto: ¿Por qué las Naciones Unidas ignoran mi sufrimiento? Cuando los terroristas cometieron esas 10.000 violaciones de los derechos humanos internacionales y la ley humanitaria, ¿por qué la ONU se mantuvo en silencio?
¿Los derechos humanos son para algunos, pero no para otros?
El constante ataque contra Sderot ha destruido nuestra posibilidad de llevar una vida normal. La alarma antes de cada ataque nos da sólo 15 segundos para buscar refugio. Quince segundos que pueden decidir, la vida o la muerte.
Sr. Presidente, ¿quién protegerá nuestro derecho a la vida? Mi familia no tiene un refugio contra las bombas, por lo que corremos al cuarto más protegido, que es el cuarto de baño.
Hay un ataque que nunca olvidaré. Oímos la sirena a las siete de la mañana. Corrimos al cuarto de baño. Los misiles cayeron junto a mi casa. Mi hermano más pequeño, que tenía 14 años salió para ver si alguien necesitaba ayuda. Halló a un hombre cuyas piernas habían sido arrancadas y a una mujer hecha pedazos.
Mi hermano menor tiene seis años. Los misiles han estado cayendo durante ocho años. Él no conoce otra realidad.
Todos sufren en Sderot. Padres y madres temen ir a trabajar, creando pobreza. Los niños temen ir a la escuela. He perdido muchas de mis clases de leyes. Mis amigos temen realizar visitas. Las calles permanecen vacías.
Sueño con la ciudad que recuerdo. Cuando el parque junto a mi casa estaba lleno de familias felices y niños jugando. Cuando la gente disfrutaba de la vida.
Aun sueño con la paz. Vendrá cuando los gobernantes de Gaza elijan la humanidad por encima del odio, cuando cesen de disparar a nuestros niños mientras se ocultan tras los suyos.
Nos rehusamos a dar la victoria a los terroristas. Elegimos vivir, mantenernos fuertes en nuestra fe, familia y amor por el país.
Sr. Presidente, ¿quién protegerá nuestros derechos humanos más básicos? Mi país ahora está tratando de hacer lo mejor, y todos aquellos que aman la vida y desean la paz deben orar para que tenga éxito.
Gracias Sr. Presidente
Difusion: www.porisrael.org
Sencillo y directo, como todo testimonio. El testimonio de una ciudadana israelí, pero también de una estudiante de leyes, que no obstante no recurrió al código. Simplemente, trasmitió lo que siente cualquier ser humano acosado. El sufrimiento. La injusticia y el doble rasero. ¿Le importa esto al mundo? La respuesta es muy triste: NO. Olvida las lecciones de la historia, cosa que jamás podría suceder con el pueblo de Israel.