Foto: Kobi Gideon GPO
Las multitudinarias y cada vez más amplias protestas contra el plan de reforma judicial del gobierno de Israel, en realidad no expresan preocupación solamente por ese tema . El gran temor es todo lo que puede ocurrir en Israel si en efecto deja de ser una democracia liberal, teniendo hoy en el poder a una coalición que incluye elementos ultraconservadores y nacionalistas con posturas que gran parte de la población considera extremistas en distintos temas. Algunos, relacionados a temas religiosos y otros a cómo lidiar con el conflicto con los palestinos.
En este sentido, las declaraciones que formuló días atrás el ministro Betzalel Smotrich, jefe del partido “El Sionismo Religioso” , diciendo que “hay que borrar a Hawara” – la aldea palestina de la que salió el terrorista que asesinó a los hermanos Halel y Yagel Yaniv- encendieron una línea roja. Sus aclaraciones posteriores diciendo que no se refirió en ningún momento a matar a población civil inocente sino a una acción decidida contra el terrorismo , llegaron demasiado tarde.
Desde sus declaraciones, la protesta no hizo más que intensificarse, llegando inclusive a reservistas de diversas unidades de las Fuerzas de Defensa de Israel y hasta a reservistas de una de las escuadrillas de combate centrales de la Fuerza Aérea. No oímos que nadie haya hablado en las diversas cartas de protesta, de las palabras de Smotrich. Pero nos atrevemos a estimar que calaron hondo y dejaron a muchos preocupados ante la eventualidad que en Israel un ministro conciba impartir una orden ilegal e inmoral contra civiles. Y los hilos quedan conectados con mayor facilidad, si Israel deja de ser la democracia que es hoy, si el gobierno pasa a poder gobernar sin frenos ni controles de parte de la Suprema Corte de Justicia.
Al parecer, al ver el aluvión de protestas de parte de reservistas que todos saben no sólo que arriesgan sus vidas cuando están en servicio sino que voluntariamente dedican parte de su vida a defender a Israel, el propio Smotrich supo atar cabos. Y si bien sería más que prematuro y hasta ingenuo suponer que eso es el comienzo de una nueva página más moderada en su vida política, al menos parece haber entendido el error garrafal que cometió. Y si algo aprendió de ello, es positivo.
Este miércoles por la noche, Smotrich publicó una carta de disculpas a los pilotos señalando haber comprendido que sus palabras sobre Hawara fueron interpretadas como un llamado a bombardear la aldea. Prometió que nunca jamás permitirá que sea impartida una orden ilegal.
Smotrich salió de hecho en defensa de la protesta de los pilotos de combate en la reserva que se expresaron públicamente contra la reforma diciendo que tiene claro que “no era un pretexto en una campaña cínica” contra el plan sino “algo que les inspiró un verdadero temor y gran preocupación”. Smotrich agregó: “No puedo eximirme de la responsabilidad y culpar a otros. Tengo que hacer jeshbon nefesh”, una expresión que significa introspección, analizarse a sí mismo y los errores que cometió.
“Ante todo, me es importante disculparme ante las Fuerzas de Defensa de Israel y sus comandantes, especialmente ante la Fuerza Aérea, si contribuí a romper la confianza tal importante entre Tzahal, como ejército del pueblo, y los políticos electos”, escribió Smotrich.
El ministro contó que un amigo personal suyo, que es piloto en la reserva, le explicó lo que estaba ocurriendo, que a él le costó entender qué tenían que ver sus declaraciones con la protesta. “Me llevó tiempo entender la conexión entre las dos cosas y qué me estaba planteando mi amigo.Me explicó que algunos de los pilotos tomaron mis declaraciones como un llamado a ´borrar´la aldea y sus habitantes desde el aire, con la Fuerza Aérea. Que un ministro importante , miembro del gabinete de seguridad, tenga una intención así, combinado con lo que ellos entienden como un plan de reforma judicial que daría poder ilimitado al gobierno electo, los hizo sentir un verdadero temor ya que a su modo de ver, eso puede conducir en el futuro a que sea impartida una orden ilegal a la Fuerza Aérea, algo en lo que no están dispuestos a tomar parte”..
Y también escribió que al ser fuertemente criticado por sus declaraciones, lo tomó al principio como otra crítica de “la izquierda que no acepta un gobierno de derecho legítimamente electo”, señalando que “si alguien realmente me atribuye un llamado a matar sin discriminación a mujeres y niños, eso puede únicamente ser producto de su cerebro febril, para perjudicarme, no porque se pueda creer realmente algo así”.
Pero al ampliarse la crítica también a los pilotos en la reserva, a los que se refirió en términos sumamente positivos calificándolos de “héroes” y diciendo lo que realmente es cierto, que dedican sus mejores años a la seguridad de Israel, entendió que “tengo que analizar yo mismo lo que dije”. Aseguró que “Dios es mi testigo que ni por una fracción de segundo pasó por mi mente un pensamiento desvariado como ese”, en referencia a sus palabras sobre Hawara.
Y resumió: “Los valores humanos fundamentales del Estado de Israel son comunes a todos nosotros…Nunca será impartida una orden ilegal de matar en forma indiscriminada. ¡Nunca! ¡En ninguna circunstancia!”.
Debes estar conectado para publicar un comentario. Oprime aqui para conectarte.
¿Aún no te has registrado? Regístrate ahora para poder comentar.