La figura de Moisés aparece no solo en la Torá, texto sagrado del judaísmo integrado por los 5 primeros libros de la Biblia (Pentateuco) llamada asimismo “Ley de Moisés”, sino también en el Corán, libro sagrado del Islam.
Es interesante como en “Testamento”, la última de las producciones cinematográficas dedicadas a este gran guía bíblico que fue Moisés, desarrolla sus comentarios documentales Expertos de las tres religiones monoteístas además de Profesores y Especialistas seculares.
Valdría la pena ilustrar a los islamistas y antisemitas, los cuales en estos tiempos se han rejuntado para vociferar y accionar contra los judíos y el Estado de Israel, que en el Corán Moisés, el Libertador de la Nación Judía de su esclavitud en el antiguo Egipto, es nombrado en 136 oportunidades, siendo uno de los Profetas que más se lo menciona.
En todas las religiones abrahámicas Moisés es una figura central como Profeta y Legislador. En el Libro Éxodo y en la Hagadá (lectura de Pésaj, la pascua judía) Moisés libera al Pueblo Judío para conducirlo a la “Tierra Prometida”, Canaán en aquel entonces y hoy Eretz Israel, donde se asienta el Estado Judío de Israel.
Si el Corán, redactado por Mahoma, reconoce estos escritos sagrados, no se entiende porqué los musulmanes chiitas de Irán, las numerosas organizaciones terroristas islámicas y los absurdos e ignorantes movimientos de la Nueva Izquierda Occidental, no admiten los derechos históricos, étnicos y políticos que los judíos han mantenido durante milenios, restablecidos por el Sionismo como Movimiento Judío de Liberación Nacional a fin de vivir en paz en sus tierras ancestrales.
En el Corán se cita a Moisés como “Nabí”, reconociéndolo como el Profeta de los Judíos, del mismo modo es nombrado Abraham, el Patriarca Judío que dio comienzo a la idea del monoteísmo. Afirma que Dios (en árabe Alá) le reveló a Moisés la “Tawrat” o sea la Torá hebrea. En los relatos del Corán aparece también Aarón, el hermano de Moisés y considera a ambos descendientes de “Yusuf”, Iosef en hebreo y José en castellano.
En definitiva el Corán reconoce casi toda la historia del Judaísmo y la de su sendero de retorno hacia lo que hoy es el Estado de Israel, elevando a Moisés a una posición de honor.
Se debería agregar a esta nota la historia moderna de las relaciones entre los judíos y los árabes recordando el Manifiesto firmado 100 años atrás, en 1924, entre el Dr. Jaim Weitzman, Presidente de la Organización Sionista Mundial, con el Emir Feisal donde se acordaba la voluntad de establecer en el Medio Oriente a “Arabia para los árabes y Palestina para los judíos” (A la Verdad por el Error – Palestina, de Jaim Weitzman), misión incumplida por las lamentables apetencias colonialistas de las Potencia Mundiales de aquel entonces.
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