Editorial del New York Times Impulsa a la Desaparición del Estado Judío

Lustick imagina un futuro en el que «los israelíes cuyas familias vinieron de países árabes podrían encontrar a sí mismos como ‘no occidentales’ sino árabes. «El sionismo , afirma, se ha convertido en » una idea anticuada», y los israelíes deben aceptar que «Israel ya no existiría como la visión judía y democrática de sus fundadores sionistas.»

Entonces , desde su lejana residencia en el oeste de Filadelfia , Lustick prescinde del vínculo fundacional entre los judíos con su pueblo, su tierra y su fe.

Él sugiere que una nación cuya población ha pasado de 650.000 en 1948 a más de ocho millones en 2013; ha sido miembro de la ONU desde 1949; pertenece al club de la OCDE de los países más industrializados del mundo; cuenta con más creación de empresas que cotizan en NASDAQ que todos, salvo uno o dos países , tiene el ejército más poderoso de la región; y sigue teniendo un fuerte espíritu nacional , el sionismo , en realidad, no tiene futuro.

El concepto fundamental del artículo de Lustick busca proyectar la idea de que una transformación radical del conflicto no sólo es posible sino también probable. Por lo tanto , afirma que » la desaparición de Israel como un proyecto sionista a través de la guerra, el agotamiento cultural o el momento demográfico» es un resultado plausible. En efecto, a través de su ensayo es palpable su entusiasmo por la posibilidad de desaparición del estado judío. De hecho , se compara con el final del gobierno británico sobre Irlanda, el de Francia sobre Argelia o el colapso de la Unión Soviética, eventos históricos que él declara que alguna vez fueron impensables pero ahora son vistos como resultados inevitables.

Estas analogías son transparentemente engañosas, porque colocan a Israel en la categoría de proyectos imperialista más que como un movimiento de liberación nacional de un pequeño pueblo luchando por su supervivencia. Eso nos dice mucho sobre la mentalidad de Lustick pero poco acerca de la realidad del Medio Oriente. A diferencia de los británicos de ascendencia protestante en Irlanda o los pieds noirs franceses de Argelia o incluso la nomenclatura soviética, los Judíos de Israel no tienen a dónde ir. También compara a Israel con el apartheid de Sudáfrica, el Irán del Sha, o el Irak de Saddam Hussein; muestra cuán sesgada es su visión de Israel y lo poco que entiende sobre su resistencia y capacidad de recuperación.

Vamos a poner a un lado el argumento de Lustick contra la solución de dos estados y comenzar con lo que es más impactante en su artículo de opinión , su propia propuesta de solución. Lustick argumenta que los EE.UU. y otros deben abandonar la solución de dos estados y dejar que los bandos se confronten. El párrafo clave debe ser citado en detalle:

Con el estatus pero sin función, lo que queda de la Autoridad Palestina va a desaparecer. Israel Israel se enfrentará al desafío de controlar la actividad económica y política y todas las fuentes agrícolas y acuíferas desde el Río Jordán hasta el Mar Mediterráneo. El escenario quedará listo para la opresión despiadada, la movilización de masas, los disturbios, la brutalidad, el terror, la emigración judía y árabe y el incremento de la condena internacional sobre Israel.

Lustick hace explícito el nihilismo de la izquierda anti- israelí. Él no tiene ninguna razón de peso para creer que el baño de sangre que él desea entre los israelíes y los palestinos tendrá resultados favorables para cualquiera de las partes. Pero ¿por qué no romper unos cuantos huevos si hay alguna posibilidad de una tortilla? Al igual que muchos en la izquierda anti- israelí, pero de manera más explícita  Lustick está preparado para mantener una posición de satisfacción moral que no le cuesta nada a él pero que significa un sacrificio de sangre para aquellos que mejor defienden los intereses que Lustick tiene en mente.

Lustick en realidad no cree que una solución de dos estados sea imposible. En cambio, piensa que cuando se enfrentan a una elección entre dos caminos difíciles hacia el futuro, uno debería elegir el que resulte en el fin del Estado de Israel. Una vez más, Lustick dice en voz alta lo que piensa su gente:

La desaparición de Israel como un proyecto sionista, a través de la guerra, el agotamiento cultural o el impulso demográfico, es por lo menos tan posible como una solución de dos estados.

 

La editorial de Lustick debería ser de lectura obligatoria para cualquier persona que piense que estar junto a la izquierda anti- israelí es apoyar los derechos de los palestinos. El estar con la izquierda anti- israelí es anhelar un conflicto abierto que dará como resultado el fin de Israel .  No son sólo los amigos de Israel los que deberían estar disgustados con los académicos que desean fomentar un conflicto de estas características a sabiendas, salvo que se trate de totales estúpidos, que teniendo un pensamiento tan pobre a través de hipotéticas probabilidades de la solución de un estado único, están jugando con las vidas de palestinos e israelíes.