Durante la Segunda Guerra Mundial, en Europa, mis suegros sufrieron los rigores de la persecución antijudía perpetrada por el nazismo. Los deportaron y confinaron en un campo de concentración y de trabajos forzados, Transnistria, que en ese tiempo pertenecía a Rumania, en la que imperaba un régimen fascista liderado por el general Antonescu. Se conocieron en ese ambiente de desesperanza, siendo prácticamente esclavos y decidieron casarse. La ceremonia la realizó un rabino también prisionero en el mismo campo de concentración. En ...
De refugiados a ciudadanos
La UNRWA tiene 70 años sin solucionar ningún caso; por el contrario, es un órgano parásito que, además, podría ser acusado de crímenes de guerra