Pocas teorías científicas han sido tan cuestionadas como la de la selección natural de Darwin. Una de las formas de intentar desacreditarla fue aplicar sus supuestos principios a otras áreas, por ejemplo, asignándole el falso principio de que “el pez grande se come al chico” (lo que nos hubiera llevado a un mundo de gigantes en la fauna y flora) y aplicándola a cuestiones que derivan de ideas irracionales, preconcebidas e interesadas. Así nació una seudociencia del darwinismo social que ...