Hay un campo de refugiados palestino que lleva sitiado más de 1.660 días. Han matado a cientos de residentes, y decenas de miles han tenido que abandonar sus hogares. Los que siguen allí –en su mayoría ancianos, mujeres y niños– viven en unas condiciones sanitarias inenarrables, y beben agua contaminada. Más de 200 residentes han muerto por falta de alimento o medicinas. Las condiciones del lugar son terribles, bajo cualquier parámetro. ¿Por qué la mayoría no ha oído hablar de las espeluznantes ...