Puede decirse lo que se quiera de Biniamín Netanyahu, después del discurso de ayer en la ONU, donde intentó por todos los medios desenmascarar la hipocresía retórica del presidente iraní Hassan Rohaní. Por ejemplo, se puede decir que el líder israelí es un aguafiestas y un belicista. Cuando todo el mundo festeja el acercamiento entre Estados Unidos e Irán, que signa el fin de la amenaza de un ataque a Siria y también al país de los ayatolas, viene Netanyahu ...