Si la posición del alma media entre el cuerpo y el espíritu, la forma y la idea, materia y energía, el yo tan íntimamente relacionado con ella es también el punto medio entre el ello y el tú, el afuera y nuestros lados izquierdo y derecho, es decir nuestros contactos laterales con los demás. El filósofo Martin Buber llamó ello al mundo indiferenciado extenso y anónimo del universo aún sin nombrar, yo al punto de reflexión y tú al otro ...