Hasta que no se conviven unos treinta o cuarenta años con una persona, se desconoce cuán frágil puede ser el amor y de cuantas pequeñas cosas, muchas veces inadvertidas, depende. Las etapas y ciclos por los que pasa una relación se conocen y estudian desde hace años, pero el tema de la fragilidad-en hebreo carne, basar, y shabar, romper, roto-tienen la misma raíz-, el tema de la fragilidad no recibe tanta antención. Tal vez por ello, por esa temblorosa condición, tenemos que emplear filtros naturales y hasta sobrenaturales ...