La presencia de terroristas de las FARC, o sus cabecillas, que viene a ser lo mismo, junto a las víctimas del Holocausto, amén de al lado numerosos representantes de la sociedad civil, es un hecho que provoca sonrojo, vergüenza y humilla a las víctimas de la mayor matanza de la historia. Por diversas razones que no vienen al caso, no he podido asistir este año al acto en homenaje a las víctimas del Holocausto, tal como había hecho en anteriores convocatorias, ...