Israel sigue librando una guerra contra el terror, el odio y el antisemitismo, que viene a ser lo mismo, en todos los frentes. Además, y por si fuera poco, Israel tiene que luchar contra la malintencionada incultura histórica de la UNESCO. La guerra no ha terminado, ni las batallas han disminuido. El enfrentamiento contra el mal no tiene fin. Mucho se ha escrito y mucho se escribirá sobre aquellos que llamándose cultos han manifestado el mayor error histórico en el que se ...