El judaísmo compara al ser humano con una escalera que tiene la base en la tierra y la parte superior llega a los cielos.(1) Cada peldaño de la escalera representa un reino diferente que existe en nuestro interior, cada uno más elevado y más oculto que el que le precede. Este mundo interior en hebreo es llamado nuestro néfesh, a lo que comúnmente nos referimos como nuestra "fuerza vital". Dado que cada uno de estos reinos internos posee su propio carácter, necesidades ...
Tierra, aire, fuego y agua: Los cuatro elementos de nuestro mundo interior
La tradición judía compara los bloques básicos de nuestro mundo interior con los cuatro elementos fundamentales de la creación.