Este viernes, cuando terroristas mataron en el Monte del Templo en Jerusalem a dos policías israelíes expusieron el abismo. Entre la vida normal y el extremismo. Entre el aporte a la sociedad y el odio ciego. Esos terroristas, radicales islamistas que profanaron su propio santuario al salir armados del Monte del Templo donde se halla la mezquita de Al Aksa y el Domo de la Roca y corrieron en búsqueda de los primeros policías con los que se toparan, eran ciudadanos ...