La Autoridad de Antigüedades de Israel presentó “impresionante y fascinante evidencia del campo de batalla y la ruptura de la tercera muralla que rodeaba Jerusalén”, descubierta en 2015 durante unas excavaciones para llevar a cabo la construcción de un edificio en lo que hoy es el centro de la de la ciudad.
La excavación arqueológica alumbró los restos de una torre que formaba parte de la muralla durante la época del Segundo Templo (entre los años 530 a.C. y 70 d.C), cuya fachada occidental muestra “marcas de los proyectiles que los romanos dispararon desde sus catapultas a la guardia judía que defendía la muralla”, precisa ese organismo.
“Es un testimonio fascinante del bombardeo intensivo del ejército romano, encabezado por Tito en su camino para conquistar la ciudad y destruir el Segundo Templo (judío)”, explican en la nota los directores de la excavación, Rina Avner y Kfir Arbib..
“El bombardeo tenía como objetivo atacar a los centinelas que guardaban la ciudad y ofrecer protección para que las fuerzas romanas pudieran acercarse a las murallas con arietes para romper sus defensas”, detallan los arqueólogos.
Según el historiador romano de origen judío Flavio Josefo, la muralla se diseñó para proteger un nuevo barrio de la ciudad que se había desarrollado fuera de la ciudadela amurallada, al norte de las dos barreras que existían y fue comenzada por Agripa I, que suspendió su construcción para mostrar lealtad al emperador Claudio, lo que impidió que se acabase hasta dos décadas más tarde.
El reciente hallazgo en sus muros será presentado la próxima semana en la conferencia “Nuevos estudios de arqueología de Jerusalén y su religión” en la Universidad Hebrea de Jerusalén. EFE
Precisamente ahora que la Unesco se arroga el derecho de revisar la historia a su antojo, con arreglo a sus filias y fóbias, y de acuerdo con los intereses del mundo musulman, que viene defendiendo en detrimento de Israel, surgen estos restos arqueológicos de gran valor histórico, que ponen de manifiesto el asedio llevado a cabo por las legiones romanas, sobre la ciudad judia de Jerusalen, en el año 70 de la era comun, bajo el mando de Tito Vespasiano , tal como la própia historia se encarga de recoger..
¿Que hacer pues ante tamaña evidencia? deben estar preguntandose a estas horas, las «lumbreras» que adoptaron la decision, de «desjudaizar» Jerusalen, con el objetivo de hacer de ella entrega incondicional a los musulmanes, siguiendo asi al pie de la letra, el guion préestablecido y anteriormente referido … todo pues en perfecta concordancia…
Por fortuna, la historia una vez mas, se rebela ante tanta estúlticia, y valiendose de la arqueologia, ésa que la própia Unesco invoca, cuando de hacer valer sus tésis se trata; pone en evidencia el caracter partidista y sectario de tal resolucion, y su carencia de soporte historico sobre el cual poder cimentárse …
¿Cual serán a partir de ahora, los nuevos hallazgos arqueológicos que contribuyan a socavar aún mas, ésta de por ya si desprestigiada organizacion internacional? .. espectantes permanecemos ante esa posibilidad, intimamente gozosos ante este nuevo desliz (uno mas que añadir a su cuenta) tan grotesco como patético …