Por Israel


Defendemos un ideal no a un gobierno
Síguenos en Facebook Twitter Twitter YouTube RSS Feed
| viernes abril 26, 2024

Israel, ¡No des más munición a tus enemigos!

Declarar la muerte de la democracia israelí perjudicará la seguridad del país y de sus ciudadanos, y hará el juego a sus enemigos: el BDS, Nasrallah y Jamanei, que se ríen y traman cómo explotar esta nueva situación en detrimento de Israel.


Tras una reciente visita a Israel, ambos estamos profundamente preocupados por el grado sin precedentes de tensión y pura animosidad que impregna la escena política.
Como amigos de Israel y no como ciudadanos israelíes, no pretendemos intervenir por motivos partidistas, sino hacer sonar la alarma sobre la posibilidad muy real de que los enemigos del Estado judío exploten la retórica actual y perjudiquen al país en su conjunto.

Protestas contra el gobierno y su reforma judicial.

Protestas contra el gobierno y su reforma judicial.
(EPA)
La polarización y la confrontación políticas no son nada nuevo para nosotros, pues son tendencias ya arraigadas en nuestros propios países y en todo el mundo occidental, desde Estados Unidos hasta Italia. Pero nuestra experiencia en la lucha contra los sucesivos intentos de deslegitimar el Estado de Israel nos demuestra que este país sencillamente no puede permitirse el nivel de tensiones políticas internas que pueden sufrir otras democracias.
Israel ha demostrado una y otra vez ser el país más resistente del mundo en lo que se refiere a la guerra física. Pero también está sometido a la guerra política más insidiosa: continuamente atacado por instituciones internacionales como la ONU, la Unión Europea y la Corte Penal Internacional (CPI), así como por una serie de gobiernos extranjeros, organismos de derechos humanos, el mundo académico y gran parte de los medios de comunicación del mundo.
Es en este ámbito donde el discurso y los enfrentamientos actuales serán más perjudiciales. Para que Israel sea fuerte, prospere, sea una fuerza del bien en la región y en el mundo, y para defenderse de las incesantes campañas de guerra política, necesita estar unido en las cuestiones básicas, a pesar de todos los desacuerdos que puedan surgir razonablemente en torno a propuestas y políticas concretas. Esa unidad nacional se está viendo erosionada por el tono y la conducta del debate sobre las reformas del poder judicial presentadas por el gobierno de coalición.
Hemos oído voces israelíes que nos dicen que lo que está en juego es la supervivencia de la democracia en el país, si no está muerta ya. Nos han dicho que es mejor no hacer ni una sola concesión que intentar llegar a un acuerdo. Estas actitudes extremistas están lejos de producir una reforma mejor y se acercan peligrosamente a envalentonar e incluso incitar a los numerosos enemigos internacionales de Israel.
Declarar la muerte de la democracia tiene consecuencias que van mucho más allá de la política interior. A lo largo de los años, ambos hemos luchado contra todos los intentos realizados por grupos palestinos de acusar a soldados y dirigentes políticos israelíes en la CPI, contra todos los esfuerzos realizados por el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, institucionalmente antiisraelí, para condenar el derecho soberano de Israel a la autodefensa, y contra las sucesivas campañas del movimiento Boicot, Desinversiones y Sanciones, así como de organismos internacionales, para hundir la economía de Israel.
Uno de los argumentos más sólidos contra las perniciosas ambiciones de cada uno de estos enemigos políticos de Israel ha sido presentar el sólido argumento de que el país cuenta con un sistema judicial respetado internacionalmente, democráticamente responsable y que proporciona un trato justo y justicia para todos. Intentar perjudicar al gobierno con una retórica apocalíptica puede tener éxito o no, pero sin duda socavará cualquier defensa de este tipo y perjudicará la seguridad de Israel y de sus ciudadanos.
En medio de predicciones de fatalidad y desastre, merece la pena tener en cuenta que naciones como el Reino Unido, España, Italia y Canadá, entre otras muchas democracias liberales, tienen sistemas para nombrar a los más altos cargos judiciales que son mucho más intrusivos por parte del poder ejecutivo que cualquier cosa propuesta por este gobierno israelí, y nadie se atreverá a decir que no son democráticos.
La decisión de llegar al extremo, la voluntad de demonizar al adversario político y la deslegitimación de los resultados del proceso electoral sólo pueden interpretarse como un Israel debilitado. Y ya sabemos lo que ocurre cuando esa se convierte en la percepción predominante en el extranjero, sea cierta o no. Considere lo siguiente: ¿qué cree que están pensando Nasrallah y Jamanei? ¿Qué crees que dirán los activistas del BDS? ¿Cómo reaccionarán los enemigos de Israel en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU?
Se estarán riendo, aplaudiendo y tramando la mejor manera de explotar esta nueva situación en detrimento de Israel. En política, no todo vale en ningún país, y menos en Israel.
Dejen el apocalipsis donde debe estar, al final de los tiempos. Restaure la racionalidad en el debate político, acepte las diferencias, proponga soluciones modificadas y esté dispuesto a negociar un acuerdo. La alternativa a la razón es, por supuesto, una mayor tensión interna; pero lo que es aún más grave, renovados ataques jurídicos, políticos, económicos y comerciales desde más allá de sus fronteras.
Como defensores de Israel en la escena internacional, le rogamos que vuelva a la moderación y al compromiso en aras del interés nacional.
***El coronel Richard Kemp es un antiguo comandante de las Fuerzas Armadas británicas.
***Rafael Bardaji es ex Consejero de Seguridad Nacional de España.
 
Comentarios

Éstas declaraciones tienen tanto mas valor y relieve, por cuanto emanan de alguien tan cualificado como lo es un álto mando del ejercito británico, presente y por ende testigo del récto proceder de Tsahal, y buen conocedor ademas de la realidad politica israeli …no deberián pues caer en sáco róto, a comenzar por las fuerzas vivas de Israel, proclives en ocasiones a autoflagelárse, haciendo asi bueno el discurso tendencioso de la izquierda occidental, en cuyo relato se pone en duda el carácter democrático del Estado de Israel, y consiguientemente su legitimidad a ser considerado como tal, algo que a todas luces, constituye una grave acusacion , una falácia mas que añadir a la ya larga lista de acusaciones e impropérios que viene soportando el único pais democratico de médio oriente …

Deja un comentario

Debes estar conectado para publicar un comentario. Oprime aqui para conectarte.

¿Aún no te has registrado? Regístrate ahora para poder comentar.