Esta mañana tuve una sorpresa al escuchar las noticias de la televisión. El Ministerio de Relaciones Exteriores ha preparado una declaración que enviará a todas las embajadas de Israel para que informen que los asentamientos israelíes en la Cisjordania son legales.
La declaración expresa los siguientes argumentos básicos:
- La Cisjordania, que ha recuperado sus nombres bíblicos, Judea y Samaria, fue parte integral de los territorios que la Conferencia de San Remo del 24 de abril de 1920 entregaron a la Gran Bretaña como mandato con el propósito de «administrar el territorio de Palestina para establecer allí un hogar nacional para el pueblo judío».
- El 75% del territorio del Mandato fue truncado en 1921 cuando los británicos unilateralmente separaron el territorio al este del río Jordán, lo llamaron Transjordania, y lo entregaron a Abdullah, de la familia Hashemita que había sido poco antes expulsada de Arabia Saudita por Ibn Saud. Los británicos confirmaron que la Cisjordania, al oeste del río, quedaría para el pueblo judío
- El 29 de noviembre de 1947 las Naciones Unidas votaron a favor de un plan de partición entre dos países, uno árabe (no hay mención de Estado Palestino) y el otro judío. El plan, al no haber sido aceptado por ningún país árabe, nunca fue puesto en práctica, quedó nulo y sin valor.
- Los asentamientos están situados en un territorio que fue tomado en 1967 en una guerra de defensa contra Jordania, uno de los países árabes agresores.
- Durante 400 años la Cisjordania fue parte del imperio turco hasta el año 1918, cuando los otomanos, aliados a Alemania, fueron derrotados por Francia y Gran Bretaña. La Cisjordania fue anexada por Jordania en abril de 1950, acto que fue reconocido por sólo tres países.
Mi sorpresa no fue el resultado de leer esos argumentos, (no tienen nada de nuevo: muchos los expresan en cada oportunidad que pueden) sino constatar que, finalmente, después de tantos años de inexplicable silencio, el gobierno israelí ha decidido defender su posición legal, dejando a un lado su política de que «el que calla otorga»..
Otra acción que el gobierno de Israel ha tomado recientemente, y que debió haber tomado muchos años antes, fue declarar ilegal al Movimiento Islámico del Norte, que en realidad se debería llamar «Hamás en Israel» por su abierta identificación con la organización terrorista que gobierna Gaza. El Movimiento Islámico del Norte fue quien inventó la calumnia de que los israelíes quieren apoderarse de la Mezquita Al-Aksa, libelo que ha sido adoptado entusiastamente por Mahmoud Abbas y utilizado por los palestinos para incitar a sus jóvenes a acuchillar judíos.
El siglo XX ha traído a M.O dos hechos fundamentales que han marcado a fuego la región y determinaron una dirección del futuro. El petróleo, la refundación del Estado de Israel y la reunificación de Jerusalem. Alguien se preguntará ?, que relación existe entre estos hechos? y como afectaron los acontecimientos ?.
Pues bien, sin petróleo, en primer lugar nadie se hubiera interesado por un mar de arena con cantidad de tribus nómades, guerrenado entre sí, para entretenerse.
Sin Judíos que quieran volver a Israel, y sin Israel y Jerusalem, todo el petróleo se habría dedicado a lujos de los Jeques y no habrían formado esos ejércitos formidables, para enriquecer a los fabricantes de armas, pues se hubieran matado entre ellos solo a espada.
Sin Israel y Jerusalem no habría sido necesario inventar un «Pueblo Palestino», ni un OLP, ni un «setiembre negro», y tal vez Saddam Husein no habría adquirido misiles «Scud», etc, etc.
Es una incógnita lo que habría sido el mundo actual, sin Israel e Ismael, si así comenzó la civilización occidental, tal vez así termine?
A Israel se le asigna desarrollo, ciencia, arte y tecnología.
A Ismael se le asigna petróleo, gas, guerra y terrorismo.
Hay algo que se me ha olvidado ?……………………………………