Traducido para Porisrael.org por Dori Lustron
The New York Times informa que Israel y Egipto están trabajando en secreto para luchar contra ISIS en la península del Sinaí. Desde hace más de dos años, con la aprobación oficial egipcia, el Estado de Israel ha realizado más de 100 ataques aéreos dentro de Egipto utilizando aviones, helicópteros y drones que vuelan en largos arcos sinuosos para parecer que vienen de la dirección de El Cairo. . El ejército egipcio niega el informe , pero los israelíes no lo hacen . Jerusalén simplemente se niega a comentar.
Los jihadistas en el Sinaí han estado librando una insurgencia mortal contra el gobierno egipcio desde poco después que el ejército arrestara al dictador Hosni Mubarak en 2011. La insurgencia consiste en grupos mezclados, desde tribus beduinas descontentas hasta Al Qaeda, pero más recientemente, Ansar Bayt al-Maqdis, la facción más poderosa y organizada, cambió su nombre a Provincia del Estado Islámico del Sinaí, como si su territorio, tal como es, es la provincia de enclave separada del «califato» en Egipto.
Ya mataron a miles de personas, derribaron un avión de pasajeros ruso con una bomba de dos libras contrabandeada a bordo, asesinaron al fiscal jefe Hisham Barakat con un coche bomba en El Cairo, masacraron a cientos de compañeros musulmanes en una mezquita hace apenas un par de meses, e incluso se apoderaron brevemente del control de la pequeña ciudad de Sheikh Zuwaid, a apenas una docena de millas de la frontera de Egipto con Gaza e Israel . Han utilizado misiles fabricados en Rusia para derribar helicópteros, explotar tanques y hundir patrulleras y han dejado un sangriento rastro de civiles muertos desde el Sinaí hasta Alejandría y El Cairo.
En un mundo menos estúpido del que realmente vivimos, la alianza militar entre Egipto e Israel no sería polémica ni secreta. Egipto firmó un tratado de paz con Israel en 1979, e ISIS y sus afiliados son enemigos comunes de Egipto e Israel.
Sin embargo, describir esa paz como fría es poner las cosas suavemente. Egipto es uno de los países más virulentamente antisemita del mundo, mucho más que incluso la mayoría de los países árabes, especialmente en comparación con los más lejanos como Marruecos y Omán. Los medios estatales «dominantes» de Egipto están inundados con la clase de locura que solo encontrarán en Occidente en el programa de radio de Alex Jones, que incluye acusaciones de que Israel exporta el virus del sida en todo el mundo, corrompe a la juventud egipcia con goma de mascar afrodisíaca y esclaviza económicamente al planeta de la forma en que los judíos supuestamente lo hicieron en el período previo al Holocausto.
El presidente de Egipto, Abdel Fattah el-Sisi, tiene razón al asociarse con Israel en el Sinaí, pero está cometiendo uno de los mismos errores a largo plazo que Mubarak cometió durante décadas al negarse a ordenar a los medios que moderen la histeria. Estoy totalmente a favor de la libertad de prensa, por supuesto, especialmente aquí en Occidente, pero Egipto nunca ha tenido una prensa libre y casi seguro que no lo hará pronto, así que si el gobierno debe controlar la línea editorial, por lo menos, debería usar ese poder para bien al menos ocasionalmente.
Los egipcios están sufriendo de sus propias actitudes fanáticas mucho más de lo que los israelíes son hoy en día de todos modos. Pueblos y gobiernos aferrados a teorías de conspiración paranoica (intolerantes o no) son incapaces de resolver sus problemas, en parte porque no están diagnosticando lo que les aflige correctamente, sino también porque pierden tiempo, energía y recursos combatiendo con fantasmas, a veces son debilitantes y tienen resultados sangrientos. La historia está repleta de ejemplos, desde los Juicios de brujas de Salem hasta la Alemania nazi. Para enmarcarlo de otra manera, imagina visitar a un médico con síntomas respiratorios y te pone en quimioterapia por un cáncer que no tienes en lugar de un tratamiento con antibióticos que podría curar fácilmente la neumonía que tienes. Simplemente te recostarás en la cama, medio muerto por terribles efectos secundarios, y te enfermarás más.
Nadie debería esperar que los mensajeros y propagandistas estatales de Egipto publiciten que los israelíes son amigos y aliados, pero tal vez quieran considerar calmarse por un tiempo e informar sobre sus vecinos de manera realista. Contrariamente a la creencia popular, el Estado de Israel no representa ninguna amenaza para Egipto. Los israelíes nunca, nunca, se despertarán aleatoriamente una mañana y decidirán invadir Egipto por el simple hecho de hacerlo. ISIS, sin embargo, ya ha destruido a dos países árabes en pedazos.
Es lo mejor que está haciendo Egipto asta actuando con inteligencia