La visita realizada el día 3 de enero, 2023 por el ministro de seguridad nacional de Israel Itamar Ben Gvir, al Monte del Templo provocó respuestas furiosas en Jordania. La cancillería de Jordania condenó duramente la visita y advirtió sobre una escalada y «una tendencia peligrosa, que la comunidad internacional debería evitar tomando medidas inmediatas». El vocero del ministerio Sinan Al-Majali, dijo que el gobierno israelí es responsable «por las graves consecuencias de esta escalada, que torpedea todos los esfuerzos de evitar un incremento a la violencia». El ministerio llegó incluso a llamar a consulta al embajador israelí en Amman para presentar su protesta ante la visita.[1] Se escucharon respuestas mucho más duras de los parlamentarios jordanos, que pidieron romper relaciones con Israel y expulsar a su embajador. Varios parlamentarios incluso exigieron abrir la frontera y permitir librar el yihad contra Israel y permitir la transferencia de armas a organizaciones terroristas en Cisjordania, mencionando a la milicia Guarida de Leones en Naplusa y el ala militar de Hamás, las Brigadas ‘Izz Al-Din Al-Qassam. Algunos de los parlamentarios expresaron su voluntad de convertirse ellos mismos en mártires.[2]
La prensa jordana publicó artículos muy mordaces junto a caricaturas políticas condenando a Israel. Entre ellos se encontraba un artículo particularmente estridente de Rashid Hassan, un columnista jordano de origen palestino. En su columna publicada el 8 de enero, 2023 en el diario Al-Dustour, este elogió a «los leones» de Palestina – aparentemente refiriéndose a la milicia Guarida de Leones – por su compromiso con el enfoque de combatir contra Israel hasta lograr la victoria o el martirio. Al subrayar que la manera de liberar la tierra palestina y los lugares santos de «la inmundicia a la despreciable ocupación nazi» es a través de la sangre, el sacrificio y el martirio, este calificó a los líderes de la Autoridad Palestina de «especuladores que vendieron la patria muy barato» y afirmó que este camino de resistencia intransigente es una sentencia de muerte para los acuerdos de Oslo con Israel.
Lo siguiente son extractos traducidos de la columna de Rashid Hassan: [3]
«Una de las cosas más maravillosas que encarnó, presentó y enfatizó la gloriosa revolución de los leones palestinos es la necesidad de anteponerse al enemigo sionista y continuar la confrontación hasta lograr la victoria o el martirio. Aunque esta idea no es nueva en esencia, subraya la estrategia de esta tremenda revolución, es decir, que no hay vuelta atrás de la resistencia y la confrontación y ningún sustituto para este camino de resistencia, es decir, expulsar al enemigo y liberar la tierra y los lugares santos de la inmundicia de la despreciable ocupación nazi. Confrontación hasta el martirio.
«Debe enfatizarse que la confrontación no es una artimaña o alguna charla ociosa, o inventar teorías a distancia que no tienen fundamento en la realidad. Es shahada e istishhad – martirio y sacrificio – que el poeta ‘egipcio abasí de comienzos del islam Muslim Ibn al-Walid denominó… ‘el sacrificio más exaltado’, lo que eleva el valor de este poderoso emblema (es decir, el martirio) entre nuestro pueblo combatiente yihadista y especialmente entre los miembros de la joven generación revolucionaria que ha elegido este difícil camino, el camino más ilustre, sellado con sangre, el camino de la eternidad.
“Estos leones le han dado un vuelco al enemigo tiránico, a aquellos que están en el abandono (en sus deberes) y a los especuladores que vendieron muy barato la patria, por un puñado de centavos.
“El camino de la revolución, señores, es el camino de la sangre derramada… El camino de la revolución es el camino del martirio. El camino de la revolución es el camino eterno, el camino de la victoria y la liberación del pantano de la derrota, el único camino para restaurar ¡el honor y la gloria! Y en este punto yo digo una sola frase y nunca me cansaré de repetirla: que la resistencia es la forma más rápida de deshacerse de la ocupación y restaurar a la Palestina árabe, pura y purgada de la inmundicia sionista – al seno de su célebre nación árabe y restaurar la nación árabe en Palestina. Esta es la forma más rápida de limpiar la tierra de los diferentes virus que han contaminado su suelo, sus cielos, su aire y sus aguas… Esta es la misma difícil ecuación que ha quedado grabada, e incluso grabada, en el corazón y en la conciencia de los leones de la revolución con la sagrada expresión: ‘confrontación hasta el martirio’… Este es un llamado a la dirigencia palestina a que salgan del pantano de la impotencia y de la rendición. Es una pena de muerte para la empresa de arreglos con Israel, concesiones a esta y abandono de la patria y para los líderes que firmaron los acuerdos de Oslo. Es el entierro de la vergonzosa cooperación en el área de seguridad y la destrucción de los espías, los delatores y los que propugnan la convivencia y el acostarse con la serpiente sionista.
“Primero y ante todo, este es un mensaje a los mediadores para que dejen de faltarle el respeto a la sangre palestina, en la que los caballos del enemigo vadean hasta las rodillas, al igual que los caballos de los cruzados vadean en la sangre de los musulmanes de Jerusalén. A lo largo de la historia ningún país escapó jamás del yugo del imperialismo por medios políticos o diplomáticos. Ni Francia ni Gran Bretaña, ni siquiera Bélgica o Portugal renunciaron jamás a ninguna colonia en África, Asia o en América del Sur por su propia y libre voluntad. Al contrario, Gran Bretaña le entregó a la Palestina árabe a los sionistas, Sudáfrica a los blancos y Cachemira a los hindúes.
“Por lo tanto, no queda más remedio – y esto es lo que propone la valerosa resistencia – que implementar la hermosa expresión de ‘confrontación hasta el martirio’ para restaurar así la tierra y el honor. Este es el camino más corto hacia una vida digna y todo lo demás es equivalente a ayudar al enemigo.
Vengan y libren la resistencia y el yihad».
[1] Al-Ghad, (Jordania), 4 de enero, 2023.
[2] Albosala.com, 4 de enero, 2023, Raialyoum.com, Rumonline.net, 6 de enero, 2023.
[3] Al-Dustour, (Jordania), 8 de enero, 2023.
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