Cualquier acuerdo de unidad entre Fatah, Hamas, y la Jihad Islámica y cualquier gobierno de unidad establecido sobre las bases de un tal acuerdo, para ser aceptado por Israel y la comunidad internacional debe cumplir con los compromisos de la OLP en Oslo para combatir y prohibir toda forma de terror además de cumplir con los principios del Cuarteto para el reconocimiento de Hamas.
Sería una seria erosión del proceso de paz original si no se esperaba de Hamas que haga por lo menos lo que la OLP tenía que hacer en 1993.
Estos requisitos incluyen un compromiso transparente por parte de Hamas / Jihad Islámica para acabar con todo el terror, reconocer a Israel, y aceptar los acuerdos entre la OLP e Israel, incluyendo los muy claros compromisos adquiridos por la OLP para acabar y actuar contra el terror.
En otras palabras, no es suficiente para ningún nuevo Gobierno de Unidad palestino adherir a estos términos, sino que las partes que crean este gobierno deben ajustarse también a estos requerimientos.
Cualquier nuevo gobierno de unidad Palestino que no cumpla, formalmente y abiertamente, con estos requerimientos, sería incompatible con el proceso de paz y violaría las propias bases del proceso de paz, socavando la serie de acuerdos que sirven de bases para cualquier negociación futura.
Una tal situación de frustración de los acuerdos de Oslo obligaría a Israel a considerar a estos acuerdos no validos y a tomar las medidas unilaterales que considere oportunas para asegurar su seguridad y otros intereses, y para impedir que el armamento palestino y el dinero, incluyendo las financiaciones internacionales, llegue a manos de Hamas y de Jihad Islámica.
Traducción Vera Hachuel para TEU
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