La masacre en las oficinas de Charles Hebdo y el supermercado judío de París golpearon, con fuerza, a Japón. Tras los fluidos informes y la transmisión del horror, los canales de comunicación se orientaron hacia el debate de los límites de la libertad de expresión. El diálogo quedó enfocado en la legitimidad de publicaciones consideradas dañinas para ciertas poblaciones y la tendencia se caracterizó en la expresión de empatía hacia los sentimientos de los musulmanes, afectados con la circulación de ...
El desafío japonés
Japón se opone a las guerras ¿Cómo se da a conocer allí a Israel?