Shaná Tová a los que despertamos en este 5782 sin la resaca de la eterna culpabilidad, llenos de una vida en que la pasión aún sobrepasa a la abstención y el optimismo teje luces donde la amargura acostumbra a bordar telas de araña. Shaná Tová a quienes no ocultamos afectos ni arrancamos de nosotros mismos las fuentes donde emanan las transparencias ni miramos a los seres diferentes como extraňos pasajeros de un viaje sin parada hacia el abismo oscuro, sino hacia ...
































