En las arenas de Tel Aviv en las llanuras del Golán en las nieves del Hermón en las dunas del Negev y del Sinaí en las montañas de Judea y Samaria en el Mediterráneo, el Kineret y el Mar Rojo en vecinas tierras hostiles y otras más lejanas en las murallas sagradas de Jerusalén en el bus, en el café y en las calles hemos dejado nuestra sangre haciendo patria hemos regado con ella nuestra tierra y hemos visto crecer sus frutos por nuestro sacrificio los desiertos se hicieron vergeles y el ...