Se fueron casi juntos, el de las canciones y el de las batallas, el de la izquierda y el de la derecha, el que parecía no tenerle miedo a nada, y el que no se sentía cómodo frente al público. Dos grandes, dos esenciales en la historia del moderno Estado de Israel. A simple vista no parecen ser personalidades comparables, pero como siempre en nuestra historia, todo tiene relación y todo se engarza en la misma pieza. Arik, Ariel, el de las ...