Decía el historiador estadounidense Daniel Boorstin (The Image: A guide to pseudo-events in America; 1961) que Franklin Delano Roosevelt sabía muy bien que los reporteros vivían de las noticias y que, por eso, “los ayudaba a confeccionarlas”. Salvando las distancias morales, lo mismo puede decirse de Hamás, la Autoridad Palestina y toda organización antiisraelí. Aunque en su caso, además, saben o intuyen que los periodistas viven sobre todo de su ideología y de un mal disimulado desprecio a Israel. Sin esta suerte de operación ...