No poca es la cobertura en español sobre el conflicto palestino-israelí que merece un análisis más o menos profundo. Más, cuando dicha información ya casi parece seguir lo que parece una estructura predeterminada de parcialidad y mala praxis, las crónicas terminan por explicar por sí mismas dicho mal quehacer periodístico – más emparentado, ya, con la propaganda y la promoción de una “narrativa” en particular. Tal es el caso de la agencia de noticias española Europa P. El tratamiento de dos ...