La sorpresiva victoria electoral del primer ministro australiano, Scott Morrison, el fin de semana pasado, no solo sacudió el panorama político del país, sino que también es un buen augurio para otro país a miles de kilómetros de distancia: Israel.
“Hemos tenido una relación sólida y constructiva con Scott Morrison personalmente y tuvimos una muy buena relación de trabajo con el gobierno que él dirigió”, dijo Jeremy Jones, director de asuntos internacionales y comunitarios para el Consejo de Asuntos Judíos de Australia / Israel (AIJAC), Sindicato de Noticias Judías. ”También hemos trabajado con muchos miembros de la Oposición y de los Banqueros Cruzados. Vimos la derrota de varios candidatos racistas y parlamentarios que se asociaron con grupos maximalistas antiisraelíes“.
La victoria de Morrison, quien es oriundo del Partido Liberal de centro-derecha, se hace eco del sorprendente éxito electoral que otros candidatos de derecha decididamente han visto en los últimos años en todo el mundo, como el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, y más recientemente. con Jair Bolsonaro en Brasil y potencialmente en Canadá también en octubre próximo. Sin embargo, el austriaco Sebastian Kurz, quien también ha apostado por una fuerte posición pro israelí en Europa, ahora enfrenta elecciones anticipadas luego de que su socio menor de la coalición renunció al gobierno luego de un escándalo de video.
“El gobierno australiano no es ‘populista’ en el sentido de Donald Trump o Bolsonaro o incluso [el Primer Ministro Benjamin] Netanyahu. Es conservador, de centro derecha y se ejecuta en una plataforma de responsabilidad económica, no de populismo. Australia tiene una votación obligatoria, que milita a favor del centrismo responsable “, dijo Jones.
Netanyahu, quien visitó Australia en 2017, felicitó rápidamente a Morrison por su victoria.
“Envío felicitaciones a otro amigo mío, el primer ministro australiano Scott Morrison, quien ganó las elecciones después de que las urnas predijeran constantemente que perdería”. En el último minuto, en las últimas horas, ganó “, dijo Netanyahu el domingo durante su reunión de gabinete.
Morrison, quien asumió el cargo en agosto pasado luego de destituir al ex líder del partido y al primer ministro Malcolm Turnbull, atrajo los titulares el otoño pasado luego de que sugirió que estaba “abierto” a la idea de trasladar la embajada australiana a Jerusalén.
Si bien parecía que Morrison estaba inicialmente abierto a la idea de reconocer a Jerusalén como la capital de Israel y mover la embajada allí, en última instancia, el líder australiano solo reconoció a Jerusalén occidental como la capital del país y abrió una “Oficina de Defensa y Comercio” en Jerusalén. Este movimiento probablemente se debió a la presión del vecino musulmán de Indonesia, Indonesia, que se había manifestado abiertamente en contra de la reubicación de la embajada.
Sin embargo, Jones espera que Morrison continúe siendo un fuerte amigo de la comunidad judía e Israel, diciendo que “ha estado involucrado en temas de interés directo para la comunidad judía, ya que asistió a la escuela con muchos estudiantes judíos, tiene influencias políticas bien dispuestas”. a Israel y a los judíos, y él es un cristiano comprometido que está bien versado en la Biblia “.
De hecho, es probable que Morrison, un cristiano evangélico que asumió el cargo por primera vez en agosto pasado, continúe construyendo sobre la sólida posición pro israelí de su país.
¿Se está moviendo una embajada a Jerusalén en las cartas?
A pesar de su distancia geográfica, ambos países tienen una sólida relación económica, con más de $ 1.1 mil millones en comercio bilateral anual. Muchas empresas israelíes operan en Australia, proporcionando servicios de TI como la ciberseguridad y la tecnología agrícola.
En 2017, Netanyahu se convirtió en el primer primer ministro israelí en funciones en visitar Australia como parte de sus esfuerzos diplomáticos en curso para fortalecer las relaciones de Israel en todo el mundo. Durante la visita, Netanyahu y el ex primer ministro australiano, Malcolm Turnbull, firmaron una serie de acuerdos bilaterales en áreas como educación, innovación, agricultura, agua, energía y protección del medio ambiente.
Más recientemente, en marzo de 2019, los dos países también firmaron su primer tratado fiscal, lo que ayudará a evitar la doble tributación y la evasión fiscal.
Además de Morrison, otros legisladores pro-Israel también vieron el éxito electoral en las elecciones del fin de semana pasado. El político del Partido Liberal Dave Sharma, el ex embajador del país en Israel de 2013 a 2017, ganó una carrera cerrada por un asiento en el distrito de Wentworth, un suburbio de Sídney, en gran parte judío.
Dada su experiencia previa, se dice que Sharma ya está siendo considerado para un puesto en el gabinete y ha dicho que está abierto a la idea de un movimiento de embajada.
“Creo que deberíamos estar abiertos a considerarlo como australianos. Estados Unidos lo ha hecho”, dijo Sharma durante la campaña.
Sin embargo, Jones no espera cambios de política importantes en el futuro cercano para el gobierno de Morrison, incluida una mudanza de la embajada.
“El gobierno de Morrison probablemente actuará con prudencia y consideración cuidadosa de muchos factores diferentes en cualquier otra acción relacionada con Israel en general y con Jerusalén en particular”, dijo. ”No esperamos ninguna variación inmediata en las políticas actuales”.
En cambio, Jones dice que su organización trabajará en estrecha colaboración con Morrison para centrar la atención en la creciente amenaza de Irán.
“Instaremos al gobierno a que preste más atención a la amenaza del aventurero iraní, así como a que continúe el apoyo a la construcción de la paz a través de los compromisos entre pueblos y las negociaciones directas entre Israel y la Autoridad Palestina”.
Traducido por Israelnoticias.com
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