Mario Satz Siendo anterior el primero a la segunda, arabesco y taquigrafía se parecen en que anotan con prisas la realidad, renuncian a lo que consideran secundario y estilizan tanto las formas y palabras que finalmente es preciso descifrarlos ante la imposibilidad de simplemente leerlos. El arabesco se acerca a la fórmula, la taquigrafía al morse. El arabesco es hermoso para decorar una columna o estucar una pared, como se ve aún hoy en la Alhambra; la taquigrafía es anterior a ...