La clase periodística está aplopética por la decisión del presidente Trump de reconocer a Jerusalén como capital de Israel. Pero los conservadores, incluidos aquellos que se muestran escépticos con el presidente, deberían añadirla a la lista de decisiones de política exterior de la Administración Trump dignas de elogio. El reconocimiento de Jerusalén como capital de Israel, y el traslado a la ciudad de la embajada norteamericana, es formidable. Lo que se anda diciendo de que llevará el caos a la región son exageraciones ...