Mientras que un número creciente de ciudades en toda España han aprobado mociones a favor del BDS, Ángel Mas, Presidente de ACOM, organización española pro-Israel, está liderando la lucha para detenerlos.
Mas es presidente de ACOM, una asociación pro-Israel que trabaja para combatir el BDS en España, incluso mediante la presentación de demandas en los tribunales de Justicia.
El pasado 25 de mayo, un tribunal español falló en contra de un boicot a Israel, declarándolo nulo y sin efecto al vulnerar derechos humanos y leyes internacionales, amén de la propia Constitución española.
“Por primera vez una decisión judicial sentencia que el boicot institucional es discriminatorio, antisemita, rompe los derechos humanos y debe ser cancelada”, dijo Mas a The Jerusalem Post.
En enero, el Ayuntamiento de Langreo, una ciudad de 43.000 en el Principado de Asturias, norte de España, aprobó una declaración de boicot a Israel y a cualquier persona o empresa que apoyara al Estado judío. “De esta forma llegamos, en pleno siglo XXI, a una zona ‘Judenfrei’“, dijo Mas, igualando la táctica del boicot con la desarrollada previamente por la Alemania nazi antes de la Segunda Guerra Mundial.
ACOM presentó una demanda contra las acciones del Ayuntamiento y el tribunal aceptó los argumentos de su caso: el boicot conlleva discriminación y equivale a la incitación a los crímenes de odio.
Como muchas ciudades en el empobrecido norte de España, el Consejo de Langreo está dirigido por Izquierda Unida, el partido Comunista y el partido de extrema izquierda Podemos, un partido político creciente en el país, ha explicado Mas.
Langreo es sólo uno de muchos municipios de España que durante el año pasado emitieron una declaración en favor del BDS.
“Históricamente nos hemos encontrado en España con el mismo movimiento BDS que el resto del mundo, con llamadas a boicots académicos y similares”, dijo Mas.
“Durante el último año y medio se ha producido un movimiento tectónico electoral en España, con la extrema izquierda obteniendo acceso a las instituciones públicas y al gobierno local”.
Según Mas, Podemos ha estado bajo el escrutinio de los medios de comunicación después que la policía española revelara que el partido está financiado por los regímenes venezolano y de Irán.
“Este contexto es importante porque muestra lo crucial que es la hostilidad hacia el Estado de Israel para ellos”, dijo. “Hemos visto un aumento repentino de la intención y la calidad y la ambición de las actividades de BDS en España.”
Mas dijo que esta financiación externa ha permitido que el partido Podemos suba al poder ganando control sobre unas 40 localidades, entre ellas Madrid, Barcelona y Valencia, las tres ciudades más grandes de España.
“Esto significa aún más acceso a los recursos públicos. En ese momento lo que notamos fue que la estrategia de la campaña BDS cambió y dio un paso hacia arriba”, dijo. “Esto es algo que no hemos visto en ningún otro lugar. Se trata de una campaña deliberada y planificada para que las ciudades creen una zona “libre del Apartheid de Israel”.
ACOM ha respondido contundentemente, presentando demandas contra cada ayuntamiento o institución pública que ha declarado un boicot contra Israel.
“Ya hemos ganado varios casos”, explicando que numerosos equipos jurídicos de Ayuntamientos han consultado a ACOM para revertir la declaración.
Hasta el momento se han presentado unos 35-36 casos y se han ganado cinco o seis, añadió. Mas dijo que a pesar de las victorias, la amenaza de BDS sigue siendo muy real.
“En las elecciones de junio, Podemos puede ganar o convertirse en el principal partido de la oposición. Consideramos que esto es una amenaza existencial para la comunidad judía en España”, dijo. “Somos un pequeño grupo de activistas sin mucha financiación en la batalla en un país grande como España – y no es una guerra fácil”.
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