Israel es el país que ofrece más protección a las personas LGBT en el Oriente Medio. Sin embargo, más de 100 cineastas LGBT han firmado un compromiso de boicotear el festival de cine LGBT de Tel Aviv, patrocinado por el gobierno, TLVFest, en lo que consideran una muestra de solidaridad hacia los miembros de la comunidad LGBT palestina.
El Hollywood Reporter informa que el boicot fue organizado por organizaciones queer palestinas y por la PACBI, el brazo académico y cultural del movimiento de Sanciones de Desinversión de Boicot (BDS) que busca obligar al mundo a cortar todos los lazos con Israel en protesta por una supuesta ocupación.
Entre los signatarios se encuentran la ganadora del Premio Turner, Charlotte Prodger, el candidato a la Palma de Oro Alain Guiraudie y el galardonado documentalista indio Harjant Gill, entre otros.
En el compromiso se afirma que el movimiento LGBT “está íntimamente relacionado con la liberación de todos los pueblos y comunidades oprimidos” y se compromete “a no presentar películas ni participar de ninguna otra manera en el TLVFest u otros eventos parcial o totalmente patrocinados por instituciones israelíes cómplices hasta que Israel cumpla con el derecho internacional y respete los derechos humanos de los palestinos”.
Según la PACBI, el compromiso representa “una nueva y proactiva postura de los artistas de cine queer en solidaridad con la lucha palestina por la libertad, la justicia y la dignidad”.
A pesar de que Israel es el país que más protege a las personas LGBT en el Oriente Medio, los organizadores del boicot afirman que esas protecciones equivalen meramente a “esfuerzos de lavado de rosa”, en los que utilizan la causa LGBT para “proyectar una imagen progresista al tiempo que se niegan los derechos de todos los palestinos, sean o no maricones”.
Aunque los derechos de los homosexuales son mejores en Israel que en otras partes del Oriente Medio, como Arabia Saudita e Irán, los prejuicios culturales y la influencia de las organizaciones islámicas extremistas hacen que muchos homosexuales sean oprimidos de forma rutinaria. El año pasado, la Autoridad Palestina prohibió cualquier actividad LGBT en Judea y Samaria, y un portavoz de la policía las describió como “perjudiciales para los valores e ideales más elevados de la sociedad palestina”.
Los cineastas y otros artistas han intensificado su activismo antisionista en los últimos años, adoptando regularmente posiciones contra el Estado de Israel. Cantantes como Lorde y Lana Del Rey suscitaron polémica cuando anunciaron que no actuarían en Israel, mientras que Madonna también acaparó los titulares en la final del Concurso de Canciones de Eurovisión del año pasado en Tel Aviv cuando su actuación contó con una bailarina que llevaba la bandera palestina.
Traducido por Israel Noticias
¡Cuanta pobreza mental!