Los funcionarios públicos israelíes condenaron a una organización estadounidense pro-BDS por promover una teoría de conspiración antisemita que pretendía mostrar una conexión entre el sionismo, la brutalidad policial y “la colonización de Palestina”.
Los reclamos fueron publicados por primera vez por el “Proyecto Mapeo”, un grupo del área de Boston que afirma ser un “colectivo multigeneracional de activistas” de “naciones tribales”, el viernes pasado. La iniciativa, que proporciona una base de datos de búsqueda y un mapa de cientos de instituciones estadounidenses y judías, fue respaldada posteriormente por Boston BDS, un grupo regional afiliado al movimiento Boicot, Desinversión y Sanciones.
“Nuestro mapa interactivo ilustra algunas formas en las que el apoyo institucional para la colonización de Palestina está estructuralmente ligado a la vigilancia y la supremacía blanca sistémica aquí donde vivimos, y a los proyectos imperialistas estadounidenses en otros países”, dice Mapping Project. El grupo también afirmó que los “amplios vínculos entre las agencias policiales y la Liga Antidifamación (ADL)” contribuyen a la “vigilancia colonial”.
En respuesta, Lior Haiat, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel, dijo el viernes que el grupo responsabiliza a los judíos por “cualquier cosa que esté mal en el Gran Boston”.
“Todo este proyecto recuerda un peligroso patrón de actividad antisemita conocido desde la antigüedad hasta los horrores del siglo XX: un patrón que ha llevado a la violencia contra los judíos y sus instituciones”, continuó Haiat. “Esta publicación revela la verdadera y fea cara de BDS Boston, que no es más que una organización antisemita conspirativa. Hacemos un llamado a todas las personas decentes para que se opongan a esta publicación y condenen a la organización y a quienes están detrás de esta campaña racista”.
La afirmación de Mapping Project se basa en una teoría de conspiración que alega que el Seminario de Liderazgo de ADL en Israel, que lleva a oficiales de policía a Israel para capacitarlos en la lucha contra la violencia extremista y el terrorismo, es el culpable de la tensión racial entre los estadounidenses negros y las fuerzas del orden. El grupo también se basa en la estrategia de hacer que el conflicto israelí-palestino sea «interseccional» al culpar a los judíos estadounidenses por el racismo y otros problemas relacionados con la desigualdad racial en los EE. UU.
La ADL ha respondido repetidamente a acusaciones similares sobre su seminario policial. En 2020, durante los debates sobre la vigilancia que siguieron a la muerte de George Floyd, la directora regional de ADL San Diego, Tammy Gillies, argumentó en un artículo de opinión para el San Diego Tribune que trazan una “conexión absurdamente ilógica”.
“Buscar vincular a Israel con la mala conducta de la policía estadounidense excusa la historia de siglos de racismo e injusticia que ha plagado a nuestra nación desde sus inicios”, agregó.
En julio pasado, George Selim, vicepresidente senior de ADL, dijo a the Jewish Telegraphic Agency que la conspiración es una «excusa extraña».
Este marzo, surgieron rumores de que la ADL consideraba terminar el programa, pero no se anunció ninguna decisión.
Traducido para Porisrael.org por Dori Lustron
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