El informe de Amnistía presentado este mes no sólo califica de apartheid el tratamiento que Israel aplica a los palestinos en Cisjordania. La ONG amplía esa definición al régimen legal bajo el que viven los árabes dentro de las fronteras de lo que es estrictamente Israel. Este hecho por sí mismo demuestra la estupidez del informe y que Amnistía no es de fiar. En Israel los árabes pueden asociarse políticamente, votar, ser elegidos a cargos públicos, rezar públicamente y en mezquitas, ...