Una de las carácterísticas del pueblo judío es su larga memoria. Simplemente, no puede permitirse olvidar. Junto a las muchas cosas buenas para recordar, hay lamentablemente también terribles tragedias y mucho sufrimiento. Los horrores del Holocausto fueron evidentemente el mayor ejemplo, precedido y sucedido por no pocas expresiones de antisemitismo, un odio irracional que no esperó a los nazis para aparecer. Y se lo vivió también en Ucrania. Más de un millón de judíos fueron asesinados en lo que es hoy ...