Yo acuso a las repúblicas y republiquetas sudamericanas-excepto Paraguay-, a sus mediocres líderes y pretensiosos ideólogos de complicidad con Hamás y el terrorismo islámico. Acuso a sus intelectuales, periodistas e ignorantes profesores de estar a favor de la muerte y los usurpadores, de admirar a los asesinos de su propio pueblo y de situarse en el lugar equivocado de la contienda deshonrando así a la democracia y a la libertad. Acuso a Maduro, Galeano, Morales, C. Kirshner y Dilma Rousseff ...